Ciudad de México.- El primer cuadro de la capital, mejor conocido como el Zócalo, podría cambiar su nombre para dar pie a un homenaje, pues, legisladores consideran que la manera de nombrar a este lugar debe cambiar y preservar la historia del país. Es por eso que se propuso un nuevo nombre que se convertiría en una forma de recordar a los héroes mexicanos del pasado. Esto a la par del cambio de nomenclatura de diferentes avenidas de la capital.
En ese sentido, en el Senado de la República se cocina este cambio, pues la presidenta de la Comisión de Gobernación de esta cámara, Mónica Fernández Balboa, informó que se buscará cambiar el nombre oficial del Zócalo de la Ciudad de México a “Plaza de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos de 1824”. Sin duda un cambio a la manera en que se conoce a esta zona del Centro Histórico.
Todo esto surgió en octubre pasado, después del aniversario de la Constitución Política de 1824, cuando la senadora del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) presentó el dictamen en el que se pretende cambiar el nombre del Zócalo al que se estableció en esa Constitución. Todo esto bajo el argumento de que el nombre actual obedece a un homenaje a la Constitución Política de la Monarquía Española, la cual se aprobó en la ciudad de Cádiz.
"Exhorto al gobierno de la Ciudad de México a homenajear el Bicentenario de la organización política federal establecido en la Constitución Federal del 4 de octubre de 1824 para modificar el nombre oficial actual" expresó en redes sociales la senadora morenista.
Se debe mencionar que al tratarse de un exhorto, el Gobierno de la Ciudad de México no está obligado a cumplirlo. Sin embargo, el punto de acuerdo sobre este tema se discutirá el próximo 14 de abril en comisiones y, en caso de ser avalado, pasaría al Pleno del Senado de la República, donde, en caso de aprobarse, las autoridades capitalinas estarían obligadas a realizar el cambio de nombre al Zócalo capitalino.
Cabe señalar que esta iniciativa se suma al cambio de nombre de lugares, calles y monumentos de la Ciudad de México, pues el objetivo es ajustarlos a la perspectiva histórica del gobierno capitalino, como la efectuada en el marco de los 500 años de resistencia indígena. Desde entonces, múltiples sitios han cambiado de nombre para celebrar las raíces indígenas del país. Un ejemplo claro es la Glorieta de Colón, donde se retiró la estatua para poner una escultura dedicada al pueblo mexicano. Sin embargo, esto no ha sucedido y el lugar ha sido renombrado por colectivos como la Glorieta de las Mujeres que Luchan.
Otro ejemplo se dio en agosto de 2021, cuando el nombre de la avenida Puente de Alvarado se cambió a Calzada México-Tenochtitlán, pues la forma en que se refería se rememoraba el nombre de un conquistador español. Lo mismo pasó con la estación Zócalo de la línea 2 del Metro, cuando se renombró a Zócalo-Tenochtitlán.
Fuente: Tribuna