Ciudad de México. - Este 20 de noviembre, México celebra el 114 aniversario de la Revolución Mexicana, un movimiento que marcó un antes y un después en la historia del país al transformar profundamente las estructuras políticas, sociales y económicas. Este conflicto armado, convocado por Francisco I. Madero en 1910 mediante el Plan de San Luis, buscó derrocar al régimen dictatorial de Porfirio Díaz, quien permaneció en el poder durante 36 años.
La Revolución surgió como respuesta al descontento popular ante la desigualdad social, la falta de libertad política y la concentración de riqueza en manos de unos pocos. Bajo el Porfiriato, las grandes haciendas pertenecían a elites privilegiadas, mientras la mayoría de los mexicanos vivía en pobreza extrema, sin acceso a educación ni oportunidades de desarrollo.
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El llamado de Madero, bajo el lema “Sufragio efectivo, no reelección”, fue un grito por la democracia y la justicia social. Este levantamiento, que comenzó el 20 de noviembre de 1910, derivó en una guerra civil que sacudió al país durante más de una década, pero también sentó las bases para una nueva era política en México.
Ahora bien, la Revolución Mexicana, a pesar de su complejidad y los conflictos internos que surgieron entre sus diferentes líderes, logró transformar al país de manera significativa. Entre sus logros más destacados están:
- Renuncia de Porfirio Díaz: En 1911, Díaz dejó el poder y se exilió en Francia, poniendo fin a más de tres décadas de dictadura.
- Promulgación de la Constitución de 1917: Este documento sentó las bases para una nueva organización política y social, incluyendo derechos laborales y agrarios.
- Reforma agraria: Impulsó el reparto de tierras, beneficiando al campesinado y desmantelando grandes latifundios.
- Nacionalización del suelo y subsuelo: Estableció que estos recursos pertenecen a la nación, sentando las bases para la nacionalización del petróleo décadas después.
- Mejoras laborales: Reconoció derechos laborales, fomentó el sindicalismo y estableció condiciones dignas para los trabajadores.
- Reforma educativa: Impulsó la educación pública gratuita y obligatoria, mejorando el acceso al aprendizaje para las clases populares.
Hay que señalar que la Revolución Mexicana no solo representa un cambio de gobierno, sino una lucha por los principios de igualdad, justicia, equidad y libertad. Aunque sus ideales no se cumplieron de manera inmediata, sentaron las bases de un México moderno y democrático.
Cada 20 de noviembre, este acontecimiento histórico se conmemora como un día de reflexión y descanso nacional, recordando a los hombres y mujeres que sacrificaron sus vidas para construir un país más justo.
Fuente: Tribuna