Ciudad de México.- Este martes, un grupo de personas se manifestó al exterior de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en descontento por el rechazo al proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá. El ministro Alberto Pérez Dayán se enfrentó a los ciudadanos, a quienes les hizo saber que no siempre se puede obtener lo que se desea, como ocurrió en este caso.
Cabe destacar que desde temprano, los mexicanos se dieron cita al exterior de la Corte para seguir de cerca la discusión en torno a los cambios que se proponían hacia la reforma judicial. Hasta esta mañana, parecía que sería aprobado por el bloque de ocho ministros que se habían alineado a favor, no obstante, Pérez Dayán emitió su voto en contra, por lo cual se desechó la idea. Después de ello, la gente calificó de "traidor" a Pérez Dayán. Dicho adjetivo se lo hicieron saber a través de gritos enfurecidos.
En su intervención, Pérez Dayán calificó las acciones de inconstitucionalidad como "totalmente improcedentes" y calificó de "insensato" oponerse al decreto, que ya se incorporó a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. El fin de semana, el presidente de la Mesa Directiva del Senado, emitió rechazo frente a la discusión que acordaron los ministros. Por ello, aplaudió la postura de Pérez Dayán, la cual llamó "sólida y valiente".
Alcántara Carrancá sugería suprimir la elección por voto popular de jueces y magistrados de Distrito, mientras que se mantendría el método de elección para los ministros de la SCJN y los magistrados electorales. Explicó que la remoción masiva de jueces y magistrados afectaría la política federal en su conjunto. Además, incluía la eliminación de la figura de los "jueces sin rostro". El ministro aseguró que su idea ofrecía una alternativa diferente.
Sin embargo, poco después de las 16:30 horas, los juzgadores no lograron concretar un consenso para avalar los cambios, pues en una discusión previa, se plantó la propuesta de que el proyecto pasara con seis votos; sin embargo, al someterse a votación, los mismos ministros determinaron que deberían ser ocho. Por ello, la reforma se quedó intacta y la elección de jueces y ministros, sigue en pie.
Fuente: Tribuna Sonora