Ciudad de México.- El diputado Gerardo Fernández Noroña del Partido del Trabajo (PT) ha presentado una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) de México contra el presidente de Ecuador, Daniel Noboa Azín. Esta acción legal surge como respuesta al allanamiento llevado a cabo por la policía ecuatoriana en la embajada mexicana en Quito.
Fernández Noroña, en su denuncia, solicita la extradición del presidente ecuatoriano a México para que sea procesado por el delito de secuestro en contra de Jorge Glas. El diputado se presenta como víctima indirecta de este acto y acusa directamente a Noboa Azín por el mencionado delito. La presentación de esta denuncia marca un quiebre en las relaciones diplomáticas entre México y Ecuador, así como en el ámbito político interno de ambos países. La solicitud de extradición plantea un desafío legal y diplomático que requerirá un análisis exhaustivo por parte de las autoridades competentes en ambos países.
No es el primer recurso legal del que México echa mano, hay que recordar que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó la semana pasada sobre la denuncia del gobierno mexicano ante la la Corte Internacional de Justicia (CIJ), argumentando que el allanamiento constituye una violación de la inviolabilidad de la sede diplomática. Sin embargo, el gobierno ecuatoriano sostiene que México intentó facilitar la fuga de Jorge Glas, quien enfrenta acusaciones de corrupción y peculado en su país.
La respuesta del gobierno de Daniel Noboa despierta preocupaciones sobre las acciones tomadas por México en relación con el asilo político y sus repercusiones legales y diplomáticas. Se espera que el caso continúe desarrollándose en la CIJ, donde ambas partes tendrán la oportunidad de exponer sus argumentos y presentar evidencia ante el tribunal internacional.
Noboa afirmó que, aunque fue una decisión difícil, consideró necesario tomar esa medida debido a lo que su gobierno percibió como una violación de las convenciones internacionales por parte de México. En una declaración pública, el presidente Noboa expresó que, si bien comprende la importancia del derecho de asilo, su gobierno considera que México actuó de manera indebida al otorgar asilo a Glas. El presidente ecuatoriano argumentó que su gobierno actuó en defensa de la soberanía nacional y en cumplimiento de las leyes internacionales al ordenar el asalto a la embajada mexicana.
Fuente: Tribuna Sonora