Ciudad de México. - Un video de la loba mexicana Seje en el Zoológico de Chapultepec se viralizó el pasado fin de semana, generando preocupación y críticas hacia la Secretaría de Medio Ambiente de la capital (Sedema). Y es que en el clip en cuestión, se observa a Seje débil, delgada y tambaleándose mientras intenta caminar, lo que desató cuestionamientos sobre su cuidado.
Ante las críticas, la Sedema emitió un comunicado informando que la loba reside en el Centro de Conservación de la Vida Silvestre de Chapultepec. Para quien no lo sepa, la loba mexicana, de 12 años de edad, ha sido una pieza clave en el Programa Binacional México-Estados Unidos para la Recuperación del Lobo Mexicano, habiendo criado a 11 cachorros a lo largo de su vida. En 2019, tuvo una camada de seis cachorros y otra de cinco en 2021, ambas con el macho 'Rhi'.
Ahora bien, recientemente, Seje perdió su jerarquía dominante dentro de su manada debido a su avanzada edad, una conducta social normal entre los lobos. Según la Sedema, una de sus hijas asumió el rol dominante, aislando a Seje del grupo. Este comportamiento fue observado por algunos visitantes el sábado pasado, quienes vieron a la loba en el foso de seguridad.
Por su parte, los veterinarios y cuidadores del zoológico intervinieron, separando a Seje del grupo para revisarla y administrarle el tratamiento necesario. Actualmente, la loba se encuentra resguardada en una zona donde recibe atención médica y es observada de manera permanente. Los visitantes fueron informados de la situación por los biólogos y veterinarios presentes.
Seje fue capturada en vida silvestre y luego destinada a reproducirse bajo cuidado profesional en Chapultepec. Este esfuerzo forma parte del Programa de Recuperación del Lobo Mexicano, que ha registrado el nacimiento de 190 crías en 43 camadas desde su inicio. Aunque el lobo mexicano fue considerado extinto en la década de 1970, programas de recuperación como este han logrado reintroducir la especie en vida libre.
A pesar del comunicado de la Sedema, muchos usuarios en redes sociales criticaron que “Seje” fuera retirada de su hábitat natural para reproducirse y ahora se encuentre en malas condiciones. Este incidente ha puesto en el centro del debate la efectividad y ética de los programas de conservación en cautiverio.
El lobo mexicano fue declarado extinto en la década de 1970, pero gracias a los esfuerzos conjuntos del Gobierno de México y la sociedad civil, la especie ha comenzado a recuperarse. La captura de los últimos siete ejemplares en vida libre a finales de esa década marcó el inicio del programa de reproducción en cautiverio. Después de 30 años de esfuerzos y colaboración entre diversas instituciones, se ha logrado la población necesaria para comenzar la reintroducción en vida libre, aunque la especie sigue siendo considerada “probablemente extinta en el medio silvestre” según la NOM 059 SEMARNAT 2010.
Este caso resalta la importancia de los programas de conservación y el continuo esfuerzo para proteger y recuperar especies en peligro de extinción.
Fuente: Tribuna