Ciudad de México.- Este mes de septiembre, México tendrá la oportunidad de presenciar un espectacular evento astronómico: un eclipse parcial de Luna, el último del año. Además, este fenómeno coincidirá con el perigeo de la Luna, o sea su punto más cercano a la Tierra. Este eclipse no solo promete una vista impresionante, sino también la posibilidad de observar las distintas fases de un eclipse lunar.
Esto sucederá la noche del próximo martes 17 de septiembre, y el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (Inaoe) informó que será visible en el país entre las 20:14 y 21:16 horas, tiempo del Centro de México. Según el sitio Time and Date, el punto máximo del eclipse se alcanzará a las 20:44 horas y finalmente, la fase de penumbra ocurrirá a las 10:49 horas.
Aunque no será un eclipse total, la porción de la Luna que entrará en la sombra umbral de la Tierra creará un efecto visual impresionante. Por fortuna, no se requiere ningún tipo de protección especial para observar un eclipse lunar, pues a diferencia de un eclipse solar, este se puede apreciar a simple vista, sin peligro para los ojos y sin la necesidad de lentes especiales.
No obstante, el uso de binoculares o telescopios podría mejorar la experiencia, permitiendo captar mejor los detalles del fenómeno. Para disfrutar plenamente del eclipse, se recomienda buscar un lugar con cielos despejados y baja contaminación lumínica. En algunas partes del país, la visibilidad dependerá de las condiciones meteorológicas, especialmente la nubosidad.
Un eclipse lunar ocurre cuando la Tierra se posiciona entre el Sol y la Luna, proyectando su sombra sobre nuestro satélite natural. En este caso, se trata de un eclipse parcial, lo que significa que solo una parte de la Luna pasará a través de la sombra terrestre.
Durante el eclipse, la Luna adquirirá un tono rojizo característico, conocido como "Luna de sangre". Este fenómeno se debe a la dispersión de la luz solar en la atmósfera terrestre, donde los colores rojos y naranjas son filtrados y proyectados sobre la superficie lunar, convirtiéndose en todo un espectáculo visual.
Fuente: Tribuna