Londres, Inglaterra.- Las voces que escuchaba en la cabeza hicieron que Mariam Benzain, de 32 años, perdiera los estribos y, en acato a Alá, asfixió y decapitó a su bebé de 5 meses de edad.
Los hechos ocurrieron el 22 de julio de 2020. Ahora, la madre marroquí deberá enfrentar a la justicia inglesa tras un análisis psiquiátrico en el que la declararon "legalmente loca".
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Ahora el jurado que estará en su audiencia tendrá que determinar si la condición mental de Mariam puede generar que obtenga una "responsabilidad disminuida" en el caso.
La autopsia reveló que la madre había golpeado, acuchillado y asfixiado a su hijo Elias Biad antes de decapitarlo. La mujer confesó ante las autoridades que asfixió a su hijo y luego le cortó el cuello.
Sin embargo, testigos del caso declararon que Mariam "creía firmemente que no había cometido un crimen, sino que había actuado en beneficio de la humanidad".
En enero de 2020, la mujer se mudó de Marruecos a Inglaterra para unirse con su esposo. Al mes siguiente, dio a luz a Elias. Una semana antes del asesinato, declaró su pareja, se percató de cambios en el comportamiento de Mariam.
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El hombre, que trabajaba como barrendero en el Ayuntamiento de Westminster, dijo que el día del crimen presintió que algo no andaba bien con su esposa, así que se apuró en el trabajo para ir lo antes posible.
Al llegar a la casa, sus sospechas terminaron ciertas. Encontró a su bebé muerto en un charco de sangre, su mujer dijo que había matado al niño para ir al cielo y estar con el profeta Mahoma.
Fuente: TeleCinco