Tokio, Japón.- Los japoneses se caracterizan por su disciplina y respeto por el orden, la limpieza y la puntualidad; como prueba de la última, la Junta de Educación de la ciudad de Funabashi castigó a siete trabajadores que se permitieron abandonar su jornada laboral dos minutos antes de su hora.
No solo ocurrió una vez, sino que la acción se repitió durante 20 meses a partir de mayo del 2019. Los empleados fueron impulsados por la encargada de reportar la asistencia, quien partía a las 17:13 horas, pese a que su turno finalizaba a las 17:15. Ejemplo que, sin vacilar, imitaron otros seis trabajadores.
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Al cuestionarlos sobre sus motivos, respondieron que lo hacían para alcanzar el autobús que los lleva a sus hogares, dado que el vehículo se marchaba a las 17:17 horas y de no alcanzarlo debían esperar media hora para el siguiente.
Como sanción, le redujeron en un 10 por cierto su salario a la pionera de las salidas anticipadas, esto durante tres meses, en tanto que dos personas recibieron una amonestación por escrito y las cuatro restantes fueron acreedores de una "advertencia estricta".
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Ante la dureza de la empresa, los internautas cuestionaron: "¿Cuántas empresas pagan adecuadamente minuto a minuto? Si ese fuera el caso, entonces el personal que trabaja un minuto extra debería recibir su pago?".
Otros comentarios sugirieron que se modificara su horario laboral o en su defecto, que el autobús se ajustara al ritmo de los empleados.
Fuente: RT