Alaska, Estados Unidos.- Ante un jurado en Alaska, Peter Wilson, de 44 años, admitió el secuestro, abuso sexual y asesinato de la pequeña de 10 años, Ashley Johnson-Barr en 2018.
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De acuerdo con la investigación policial y el registro de la época, Peter raptó a la niña de un parque de juegos, después la violó y asfixió hasta la muerte.
La autopsia, además de revelar los abusos que sufrió, evidenció que a la pequeña la estrangularon. La causa de muerte se precisó como asfixia debido a obstrucción de vías respiratorias y constricción del cuello.
El mismo mes que el cadáver de Ashley fue encontrado, Peter fue puesto tras las rejas e imputado con el delito de homicidio. Esto se logró gracias a una investigación con ADN, declaraciones de testigos y videos captados con cámaras de vigilancia.
Uno de los familiares de Peter dijo que encontró el teléfono de la niña en la bolsa del sospechoso el mismo día que la pequeña desapareció.
Medios locales reportaron que el próximo 21 de septiembre el acusado recibirá la sentencia por el crimen que cometió en 2018. Se espera que la condene sea de 99 años en prisión.
Fuente: AP, Anchorage Daily News