Sídney, Australia.- Una famosa actriz de telenovelas y su familia murieron en un brutal choque luego de que un conductor adicto a las drogas invadiera su carril en la carretera y los impactara. Él también murió.
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La estrella de la serie de televisión australiana Home and Away, Jessica Falkholt de 28 años murió en el hospital. Su hermana Annabelle de 21 años y sus padres Lars y Vivian también murieron en el terrible choque.
Los hechos ocurrieron el 26 de diciembre del 2017 luego de que asistieran a una comida navideña, sin embargo, hasta ahora surgen detalles de lo ocurrido.
Craig Whitall, un hombre de 50 años que llevaba años con una fuerte adicción a las drogas, invadió el carril contrario en la carretera e impactó su vehículo contra la unidad en la que viajaban los Falkholts, matando a Lars y Vivian al instante. Whitall también murió en el lugar.
El hombre tenía niveles potencialmente fatales de medicamentos por prescripción en su sistema. El médico forense dijo que la autopsia arrojó que consumió un coctel de drogas que incluía metilanfetamina, diazepam y antidepresivos en el sistema de Whitall después de su muerte.
La investigación del accidente reveló este martes que el sujeto estaba "fuera de control" en los meses anteriores al choque. El sujeto había estado visitando hospitales y clínicas para tener dosis extra de metadona y el antidepresivo deptran, según reportes.
El día del accidente, Whitall visitó un hospital pidiendo más metadona. Le dieron cuatro tabletas de 5 miligramos de diazepam, mejor conocido como 'Valium'.
Testigos describieron haber visto el auto de Whitall manejando de manera errática antes del choque, incluido un intento de rebasar a un vehículo que remolcaba una camioneta.
El Sr. Falkholt no pudo evitar el choque que sucedió luego de que el Sr. Whitall no pudiera esquivar una curva en el camino".
Jessica y Annabelle fueron sacadas de los asientos traseros del vehículo por personas de la zona antes de que empezara el incendio. Ambas hermanas sufrieron lesiones graves y murieron días después.
Así la despidieron amigos y familiares en una iglesia católica de Sídney.
Whitall tenía un "terrible" historial de manejo desde 1983, incluyendo condenas por manejar sin licencia y por manejar bajo la influencia de alcohol y conducir de forma peligrosa.
Los niveles de deptran en el cuerpo de Whitall al momento del fatal encontronazo eran tan altos que le pudieron causar mareo y visión borrosa, además de "una discapacidad significativa en sus funciones motoras". El caso continúa bajo investigación.
Fuente: The Sun