Luisiana, Estados Unidos.- El pasado viernes, 24 de septiembre, una mujer, de 32 años, llamada Ureka Black, arrojó a sus dos hijos pequeños desde un puente ubicado a un costado de una autopista interestatal, en Luisiana.
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Los hechos ocurrieron cuando una patrulla fue enviada a Willow Point, en la interestatal 220 sobre el lago Cross Lake, alrededor de las 11:00 horas, por el reporte del hallazgo de un niño flotando en el agua.
Al arribar al sitio, la policía encontró a un bebé, el cual fue declarado sin vida en la escena, posteriormente encontraron a otro niño, de cinco años, quien estaba gravemente herido, por lo que fue enviado de urgencia al Onchsner LSU Health, afortunadamente su estado ha ido mejorando y las autoridades estiman que podría sobrevivir.
Derivado de los hechos, la policía detectó en las cámaras de seguridad a un sospechoso arrojando a los menores desde un Dodge Caravan color gris, con matricula de Texas, por lo que emitieron una alerta.
Después de algunas horas, la policía de Waskon identificó el auto en la interestatal 20, en una zona de descanso sobre la línea de Luisiana-Texas; fue entonces Ureka Black fue detenida. Se desconoce le móvil del crimen.
Fuentes: Crime Online, New York Post