Florida, Estados Unidos.- El pasado 23 de agosto, Precious Leslie Bland, de 38 años, terminó con la vida de su bebé, de apenas año y medio, cuando en medio de un presunto ataque psicótico comenzó ahogarla en la bañera, mientras que apuñaló a su esposo y a su hija mayor, quienes trataban de impedir que la imputada atacara a la menor.
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Los hechos ocurrieron en la calle 99, del noroeste de Miami-Dade, en la avenida 30, cuando la estación de policía comenzó a recibir varias llamadas de auxilio provenientes del lugar, en las que denunciaban que escuchaban gritos.
Una vecina de la familia, llamada Thelma Sloan, reveló ante las autoridades que la mujer salió de la casa para advertirle sobre las vacunas contra el Covid-19.
Señora Sloan, hoy Dios me dio una visión. Dijo que cualquiera que tomara una vacuna contra el Covid-19 se iría al infierno.
Después de esa extraña afirmación, se suscitó el ataque en contra de la menor, Emii Bland, de apenas 15 meses de nacida. La imputada también apuñaló a su esposo, Evan Bland y a su hija mayor, quienes fueron enviados de urgencias al Ryder Trauma Center del Jackson Memorial Hospital. Ambos sobrevivieron.
De acuerdo con la declaración de Evan Bland ante los medios locales, su esposa había estado actuando de manera errática la noche del infanticidio.
Estaba molesta y no paraba de repetir 'Jesús viene' o 'el Covid nos va a matar a todos'.
Según las declaraciones de la policía, cuando arribaron al hogar de los Bland, encontraron en una bañera, sin vida y boca abajo, a la menor.
Actualmente, la imputada se encuentra detenida bajo el cargo de homicidio, dos cargos de intento de asesinato en segundo grado y dos cargos de abuso infantil agravado. Estará en prisión sin derecho a fianza.
Fuentes: Crime Online, Twitter @DavidOvalle305