Seúl Corea el Sur.- Mientras que el pueblo de Corea del Sur todavía hace frente a la gran cantidad de muertos que se registró por una estampida humana en calles del distrito de Itaewon el pasado 29 de octubre, las autoridades confirmaron que Corea del Norte había lanzado varios misiles, los cuales ya ascienden a un total de 23; uno de ellos incluso cayó muy cerca de aguas territoriales causando una gran tensión.
El presidente de dicha nación, Yoon Suk-yeol, calificó esta serie de lanzamientos como una "una invasión territorial de hecho" luego que las fuerzas armadas surcoreanas confirmaran primero 10 misiles lanzados de parte de Pyongyang; sin embargo, tras este anuncio se confirmó el lanzamiento de 13 misiles más. Expertos destacaron que estos misiles fueron una forma agresiva y amenazante de Corea del Norte de responder a las acciones militares que el país del sur ha estado llevando a cabo en conjunto con Estados Unidos.
Una vez que Corea del Sur confirmó que uno de los misiles del Norte había caído a menos de 60 kilómetros de Sokcho, el país liderado por Kim Jong-un, respondió con el lanzamiento de tres misiles más aire-tierra, evento que recordó que un día antes de este evento, Corea del Norte lanzara un aviso en donde remarcó que, en caso de continuar con ejercicios militares conjuntos entre el país que atacaban y el gobernado por Joe Biden, se pagaría "el precio más horrible de la historia".
De acuerdo con la información proporcionada por las fuerzas armadas de Corea del Sur, esta era la primera vez que un misil de Corea del Norte caía tan cerca de su territorio luego de haber llegado a un acuerdo en 1953 cuando el con¡clico bélico se pausó. Esto llevó a especular que Corea del Norte podría retomar las pruebas de armas nucleares tras haber hecho una pausa de cinco años, tiempo en que los líderes del norte y sur se reunieron en en la línea de demarcación en la zona conjunta de seguridad de Panmunjom luego de las mediaciones que llevo a cabo el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump en abril del 2018.
Cabe destacar que ante el disparo de misiles, a través de los medios de comunicación local, Corea del Sur pidió a los habitantes de la isla de Ulleungdo localizada al este a buscar refugio seguro, incluso si este era a través de búnkeres bajo tierra, causando más tensión entre los habitantes que llegaron a pensar en la reanudación de la guerra entre ambas naciones, la cual entró en periodo de pausa en 1953.
A modo de evitar afectaciones, Corea del Sur pidió que se cancelaran de manera inmediata las rutas aéreas que fueran por encima del mar de Japón, al tiempo que se pidió a las aerolíneas locales que consideraran desviaciones para que los viajeros que usan rutas con destino a Estados Unidos o Japón estuvieran a salvo. Por ahora, Corea del Norte no ha mostrado una postura diferente respecto a si los lanzamientos seguirán o solo fueron una advertencia.
Fuente: Tribuna