Texas, Estados Unidos.- El pasado 12 de mayo, las autoridades de Texas reportaron que, durante la trasferencia de varios reclusos, quienes viajaban a bordo de un autobús, un hombre identificado como Gonzalo López, de 46 años de edad, había chocado la unidad para escapar con dirección al bosque, motivo por el que se desplegó un fuerte operativo a modo de aprehenderlo de nueva cuenta y con ello, sumar un cargo más a su condena.
Sin embargo, el fugitivo pronto se vio involucrado en el asesinato de una familia pues se dijo, éste irrumpió en el domicilio de un adulto mayor ubicado en Centerville y quien, en ese momento, estaba al cuidado de su cuatro nietos, todos menores de edad. Los residentes fueron ultimados por el hombre quien además, robó el vehículo de la familia para continuar con su escape, lo cual, acercaba más a las autoridades al fugitivo para así detenerlo nuevamente.
Fue la noche del jueves 2 de junio que se reveló que éste había sido perseguido en el condado de Jourdanton donde, luego de quedar acorralado, fue acribillado por las autoridades quienes lo declararon muerto cerca de las 22:30 horas, del día antes mencionado, dando por terminadas no solo las labores de búsqueda, sino también las dos cadenas perpetuas que éste encaraba por diversos crímenes cometidos en el pasado.
- Así fue identificado
La fotografía del fugitivo fue difundida por todo el Estado a fin de poder detenerlo de nueva cuenta, lo cual permitió a Melanie Tieperman, una mujer residente de Texas, notar su presencia mientas el hombre caminaba por las calles del condado de Leon. "¡Oye, vimos al recluso! ¿Que demonios?", se escucha decir en el video que la fémina captó con ayuda de su teléfono celular, material que ayudó a la Policía a perseguirlo hasta neutralizarlo.
El domicilio donde el hombre de 46 años de edad había asesinado a una familia completa, se encuentra a 250 millas donde éste fuel ultimado por los uniformados, lo que llevó a las autoridades a remarcar que en el tiempo que se escapó tras apuñalar al chofer del autobús que trasladaba a los reos y tras ello, chocar la unidad de transferencia, no hubo peligro de abandonar el Estado y con ello, poner en riesgo a más ciudadanos ubicados en las inmediaciones.
Gonzalo López no tenía vínculos con la familia que asesinó la tarde del 2 de junio, fecha en que fue acribillado, pero sí los mantenía con la Mafia Mexicana, un grupo criminal con presencia en el sur de Texas y a quienes se les atribuyen diversos delitos como: robo con violencia, tráfico de drogas y armas, así como amenazas a transeúntes a quienes tienen prohibido ingresar al que consideran su territorio.
Fuente: Tribuna, The New York post