Albuquerque, Nuevo México.- El pasado fin de semana, un helicóptero, encargado de apagar incendios, en Nuevo México, Estados Unidos, se estrelló mientras transportaba a cuatro personas; sin embargo ninguno de ellos sobrevivió al siniestro. Las autoridades se encuentran investigando las causas del accidente, ya que, en el momento de los hechos había un clima ideal para volar.
Este lunes, 18 de julio, la Junta Nacional de Seguridad y Transporte de Estados Unidos reveló que, durante el pasado sábado, 16 del mismo mes, un helicóptero, que trasportaba a tres personas de la oficina del alguacil del condado de Bernalillo y a un bombero, se estrelló en horas de la noche. Este hecho se habría registrado después de que la nave regresara de haber apagado un incendio, lamentablemente, no se reporta a ningún sobreviviente del accidente.
De acuerdo con datos de Peter Knudson, vocero de NTSB, el helicóptero iba de regreso a su base de operaciones en Albuquerque, cuando terminó por estrellarse; sin embargo, hasta el momento se desconoce cómo ocurrieron las cosas y se estima que podrían tardar varias semanas hasta que las autoridades tengan alguna pista con respecto a lo sucedido aquella fatídica noche. Por el momento, la policía pidió la colaboración de cualquier persona que haya presenciado algo durante el accidente.
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Según información de Knudson el día en que ocurrió el incidente, Nuevo México no registró ninguna tormenta eléctrica y tampoco se reportaron lluvias y, sí bien las condiciones climatológicas podrían descartarse con dichos precedentes, lo cierto es que las autoridades pretenden cubrir todas las vías de investigación para averiguar lo que pudo llevar a estas cuatro personas a una muerte tan repentina.
Por su parte, el alguacil Manuel Gonzalez y el jefe de bomberos Greg Pérez lanzaron un comunicado en donde lamentaban la muerte de las víctimas, afirmando que por el momento se encargaran de velar por los familiares de los occisos, a quienes consideraron como héroes que perdieron la vida tras hacer "lo que amaban" y haciendo especial énfasis en que estarán eternamente agradecidos por la labor que cumplieron aquel sábado, 16 de julio, al apagar el incendio anteriormente mencionado.
Fuentes: Tribuna