Nairobi, Kenia.- Este lunes, 4 de julio, ocurrió un terrible tiroteo, en una región conflictiva, ubicada entre Kenia y Etiopia, el cual habría dejado un saldo de 160 víctimas fatales, aunque la cifra aún no ha sido confirmada por las autoridades oficiales. El líder etíope señaló a una organización de insurgentes, identificados como grupo Shene, como los autores del brutal atentado. Por el momento continúan las investigaciones.
De acuerdo con algunos informes el día de hoy se suscitó un tiroteo masivo en el área de Qellen Wellega, en la región de Oromia. Hasta el momento, el primer ministro de Etiopia, Abiy Ahmed Ali, no ha brindado información sobre el número de víctimas fatales; sin embargo, el medio Associated Press News, logró contactarse con la Asociación Amhara de América y confirmaron que las cifras podrían ser de 150 a 160 fallecidos producto del ataque.
Este ataque se suscitó a casi un mes de que varias personas de la comunidad ahmara perdieran la vida en la misma región de Quellen Wellega y se cree que el ataque anterior fue causado por los miembros del mismo grupo Shene, pero en aquel momento, los insurgentes negaron cualquier relación con dicha masacre y acusaron al Gobierno y al ejército de ser los verdaderos autores de estos sangrientos hechos.
Según algunas investigaciones, los ataques a los grupos étnicos y minorías en África son frecuentes y han ido incrementando con el pasar de los años. De hecho, se estima que varias docenas de personas, pertenecientes a las regiones de Benishangul Gumuz y Oromia han fallecido durante los últimos 3 años, tan solo durante el mes junio estiman que alrededor de 400 civiles de la etnia amhara perdieron la vida en esta región.
Por otro lado, algunos expertos en la materia consideran que esto se detendría sí el gobierno pusiera como prioridad la protección de los civiles, quienes presumiblemente quedaron en medio de una guerrilla entre los insurgentes y las autoridades gubernamentales.
Fuentes: Tribuna