Pekín, China.- Este martes 9 de agosto, las autoridades sanitarias de China confirmaron que, en conjunto con científicos de Singapur, se ha detectado la presencia de un nuevo virus de origen animal que hasta ahora, ha contagiado a un total de 35 pacientes situados en la provincia de Shandong, al este del país asiático, por lo que se emitió un reporte a modo de detallar de qué virus se trata y los síntomas que la enfermedad ocasiona.
Primeros reportes señalan que se trata de un virus del tipo henipavirus y los pacientes que lo han adquirido han mostrado frotis en la garganta además de cuadros febriles, por lo que al hacer un estudio más enfocado en conocer los orígenes de éste, se reveló que tuvieron contacto con animales antes de manifestar las molestias; sin embargo, no se ha informado si hay un contagio de persona a persona o es solo al estar en contacto con ciertas especies que portan el virus.
Pese a lo anterior, sí se enlistaron los síntomas que los pacientes han manifestado una vez que se confirma la presencia del henipavirus, los cuales son: fiebre, fatiga, tos, anorexia, dolor muscular, náuseas, dolor de cabeza y vómito, mismos que son similares a los que la cepa omicron del virus SARS-CoV-2 que ocasiona Covid-19 ha mostrado pero hasta ahora no hay un informe que vincule tanto los síntomas como al virus como tal.
No obstante, se ha informado que la presencia de este virus, al que también se le conoce como henipavirus Langya, ha sido de las alertas más importantes en la región Asía-Pacífico debido a que se ha detectado que los murciélagos de fruta son los que más portan la cepa, casi similar a la teoría que se manifestó con el Covid-19 y que llevó a la ciudadanía a cazar a estos animales cuyo desempeño en la naturaleza es similar al de las abejas, pues son polinizadores.
"Los casos de henipavirus Langya no han sido hasta ahora mortales ni muy graves, por lo que no hay que entrar en pánico", pidieron las autoridades de China.
Al igual que sucedió con el SARS-CoV-2, no hay un tratamiento específico o vacuna contra este virus, por lo que al haber un contagio relevante en la región este de China, científicos podrían comenzar a desarrollar biológicos que impidan no solo su propagación, sino cuadros graves y con ello, evitar que la situación sea similar a la emergencia sanitaria que actualmente se vive por Covid-19, la cual también tuvo origen en China.
"El coronavirus no será la última enfermedad infecciosa que provoque una pandemia en todo el mundo, ya que las nuevas enfermedades infecciosas tendrán un impacto cada vez mayor en la vida cotidiana de los seres humanos", apuntaron los expertos.
Fuente: Tribuna