Ciudad de México.- Un terremoto de magnitud 6.3 sacudió el domingo la provincia de Herat, en el noroeste de Afganistán, en la región donde un devastador terremoto mató a más de 8.06 personas una semana antes. El sismo superficial de este domingo ocurrió a las 5:36 a.m. hora local con epicentro en la ciudad de Herat, según el Instituto Geofísico de Estados Unidos (USGS). Siguieron dos réplicas, de menor magnitud.
Abdul Qadeem Mohammadi, médico jefe del Hospital Regional de Herat, dijo a la AFP que "hasta ahora se han registrado 93 heridos y un muerto". Las autoridades nacionales de gestión de desastres dijeron que todavía estaban evaluando el alcance de la destrucción más cerca del epicentro.
Según un periodista de la AFP en Herat, la mayoría de los residentes siguen durmiendo a la intemperie una semana después de un terremoto mortal, por temor a nuevos temblores. Pero algunos regresaron a sus casas para pasar la noche. "La gente de Herat está en pánico y asustada", dijo Hamid Nizami, un comerciante de 27 años. "Gracias a Alá, sucedió durante el día y la gente estaba despierta", concluyó.
- Cerca de 20 mil personas afectadas
El 7 de octubre, pueblos enteros de la región de Herat fueron destruidos por un terremoto de magnitud 6.3. El gobierno talibán ha estimado el número de muertos en más de mil 400. Otro gran terremoto el 11 de octubre, cuyo epicentro se detectó a unos 30 kilómetros al norte de Herat, sembró el pánico en una población traumatizada y dejó al menos una persona muerta y alrededor de heridas. Los temblores fueron seguidos por tormentas que dañaron las tiendas de campaña que albergaban a los sobrevivientes.
Las autoridades informaron este domingo que habían liberado a más de 528 prisioneros en Herat y las provincias vecinas de Badghis mientras en las prisiones había amenaza de colapso debido a los temblores. La mayoría de los presos liberados se acercaban al final de sus condenas, según notificaron las autoridades. Casi 20 mil personas se han visto afectadas por los sucesivos terremotos, dijo la OMS, y la mayoría de las víctimas son mujeres y niños. Al menos seis aldeas rurales del distrito de Zenda Jan quedaron completamente destruidas.
- Necesidad de refugio
Desde los terremotos, miles de personas en la provincia han estado durmiendo a la intemperie, en coches, jardines o tiendas de campaña, con sus casas reducidas a polvo. "Muchos de nuestros compatriotas no tienen un lugar donde vivir y las noches son cada vez más frías", dijo Nizami, un comerciante. Afganistán ya sufre una grave crisis humanitaria, con la retirada generalizada de la ayuda extranjera desde el regreso de los talibanes al poder. Proporcionar refugio en grandes cantidades, a medida que se acerca el invierno, será un desafío para las autoridades talibanes, que tomaron el poder en agosto de 2021 y han tensado las relaciones con las organizaciones internacionales de ayuda.
Fuente: Tribuna