Texas, Estados Unidos.- El tema del racismo es representa un gran problema a nivel social en Estados Unidos, país en el que hasta hace un par de siglos se practicaba libremente la esclavitud hacia las personas de color. Si bien, cientos de personas han luchado por erradicar la discriminación hacia las personas afrodescendiente, la realidad es que es una práctica que continúa muy vigente en el país gobernado por Joe Biden.
Un ejemplo de ello ocurrió el pasado 16 de diciembre, en un complejo de lujo ubicado en Houston, Texas, sitio en el que una repartidora de Amazon fue agredida por dos mujeres caucásicas, residentes del edificio. Resulta ser que ambas féminas acusaron a la trabajadora de ser una ladrona, para luego golpearla en repetidas ocasiones. Consciente de su situación, la agraviada únicamente atinó a grabar los hechos y evitó defenderse a toda costa.
Te podría interesar
Los hechos sucedieron en un edificio departamental ubicado en Belle Mead, en River Oaks, en las cercanías de Houston, cuando JaMaiya Miller, de 25 años, acudió al sitio para entregar un paquete, fue entonces que una mujer, residente del lugar, le permitió entrar para dejar su encargo; una vez dentro, la fémina de la tercera edad increpó en su contra y le dijo que no tenía permitido estar allí. Segundos después, otra persona mayor se sumó a la disputa y la acusó de ladrona.
“¡Hemos tenido ladrones aquí y tú eres un ladrón!”, declaró la recién llegada.
Miller intentó explicar la situación, mientras le pedía a sus agresoras que no la tocaran. La otra mujer amenazó con llamar a personal de seguridad, a lo que JaMaiya agradeció, indicando que ella era la víctima de la situación: “Gracias, llame a seguridad”, declaró la joven, a lo que la otra mujer respondió: “¡No la llamo por usted, llamo para que la saquen!”. Días después, el medio KHOU entrevistó a la agraviada, quien declaró que una de las atacantes la acusó de haberla golpeado: “Ella afirma que la estoy golpeando, mientras literalmente me golpea a mí.”
“Fue lo más aterrador porque no sabía cómo iba a terminar. Parecía una escena muy salvaje conmigo, la mujer afrodescendiente, con estas dos damas blancas ricas. Honestamente, esa fue la parte más aterradora: hasta qué punto estaban dispuestos a llegar a agredirme físicamente. Esta señora arrojó tropos racistas, como si yo fuera una ladrona y me golpeó varias veces. Nunca había experimentado un comportamiento tan racista. Fue tan fuera de lo común, pero también completamente a tono cómo las mujeres blancas históricamente han convertido su privilegio en un arma”, sentenció la víctima.
Días después, los gerentes del complejo Belle Meade emitieron un comunicado en el que aclararon que todas las entregas deben dejarse en la recepción del edificio. También argumentaron que una de las residentes había dejado entrar “por error” a JaMaiya; al mismo tiempo, hicieron especial énfasis en que la joven no debía estar ahí, debido a que se trataba de un sitio con acceso restringido: “En estos momentos, estamos explorando todas las opciones y cooperando plenamente con el Departamento de Policía de Houston.”.
Fuentes: Tribuna