Teherán, Irán.- Hace una semana, autoridades iraníes informaron al mundo entero que se había conseguido la detención de tres personas vinculadas a un caso de envenenamiento de niñas dentro de escuelas públicas como una forma de exigir el cierre de los planteles escolares; no obstante, no habían dado detalles sobre cómo fueron tales aprehensiones, dato que al parecer quedará pendiente ya que suman 100 detenidos por estos hechos.
Desde el pasado mes de noviembre del 2022, las menores de edad comenzaron con síntomas relacionados a envenenamiento con un gas tóxico, lo que llevó a que cerca de 18 escuelas de la ciudad de Qom reportaran el mismo comportamiento hasta aumentar la cifra a 650 pacientes afectadas, todas supervivientes y hasta ahora ningún deceso: sin embargo, pese a ello se ha optado por investigar los hechos por terrorismo, según datos oficiales.
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"Más de cien personas fueron descubiertas y arrestadas por su responsabilidad en los recientes incidentes en los colegios", dijo el Ministro de Interior.
Con la difusión de un comunicado de prensa, el Ministerio de Interior de Irán remarcó que los detenidos, a los que se les ha señalado como "enemigos" del país, cuentan con motivos hostiles cuyo fin es el de crear miedo entre la población y presionar para que las escuelas cierren de manera definitiva. Cabe decir que el gas que se usó para intoxicar a las menores de edad, actualmente es vinculado a uno usado por el grupo opositor Mujahedden e Khalq (MEK).
Pese a que se ha mencionado que la línea de investigación será por terrorismo, también el Ministerio de Interior de Irán afirmó que varios envenenamientos de las alumnas fueron "travesuras", pues se emplearon bombas fétidas también con el fin de presionar al cierre de los planteles. Con el fin de ofrecer un balance más detallado de las menores afectadas, se ha elevado la cifra a cinco mil alumnas con síntomas de envenenamiento en un total de 230 escuelas distribuidas en 25 provincias.
Activistas e incluso autoridades señalaron que esta manera de amedrentar se debió a la participación durante las protestas por la muerte de la joven Mahsa Amini de 22 años de edad, la cual fue detenida por la policía de la moral quienes la señalaron por no usar de manera adecuada la yihab, prensa que tiene le fin de ocultar el cabello de las mujeres quienes llegan a una edad adolescente.
Majid Mirahmadi, el cual funge como viceministro de Interior, había manifestado al anunciar las primeras detenciones que se mantendrían las investigaciones sobre estos hechos; incluso se dijo que uno de los involucrados había accedido a un plantel al cual acudía su hijo para liberar el gas y con ello intoxicar a las alumnas. Madre y padres de familia lanzaron la petición de no llevar a sus hijas a la escuela para protegerlas de este tipo de ataque.
Fuente: Tribuna