Ecuador.- Ante la creciente crisis de violencia desatada por el narcotráfico en Ecuador, Estados Unidos ha decidido enviar altos cargos militares y antinarcóticos para abordar la situación junto al presidente ecuatoriano Daniel Noboa. La jefa del Comando Sur, la general Laura Richardson, encabezará la delegación que trabajará en estrechar la cooperación bilateral en materia de aplicación de la ley a través de programas de asistencia en seguridad.
La iniciativa estadounidense se produce en un momento crítico para Ecuador, que enfrenta una ola de violencia generada por más de 20 bandas criminales. La ofensiva militar del gobierno de Noboa ha desplegado más de 22 mil 400 militares en operativos que abarcan tierra, aire y mar. Patrullajes, requisas en las calles, operaciones en cárceles y toques de queda son algunas de las medidas implementadas para hacer frente a los ataques del narcotráfico.
La violencia reciente ha dejado un saldo de 16 muertos, y las autoridades ecuatorianas buscan controlar la situación con una estrategia integral. Sin embargo, la tarea se complica con episodios como una alerta de bomba falsa y la explosión de un artefacto por parte de agentes policiales en Quito. Estos incidentes se suman a la incertidumbre y a los motines en las prisiones del país.
El jefe policial ecuatoriano ha anunciado un replanteamiento de estrategias, destacando la importancia de trabajar en grupos más reducidos de agentes técnicos y operativos para garantizar el orden. Mientras tanto, los esfuerzos del gobierno se ven desafiados por nuevos episodios, como la colocación de explosivos en diversos puntos de la capital, aunque sin víctimas ni heridos.
En medio de la crisis, un video sorprendente ha circulado, protagonizado por Fabricio Colón Pico, un cabecilla de una pandilla regional que se fugó recientemente de una cárcel. En el video, Colón Pico pide garantías a las autoridades para su vida en caso de una posible entrega, argumentando que escapó porque temía por su vida. Aunque la autenticidad del video no ha sido confirmada por las autoridades, el presidente Noboa respondió de manera firme, afirmando que a los terroristas se les debe tratar como tales y que el país está harto de que las condiciones las impongan los criminales.
Además, se han registrado nuevos incidentes en centros carcelarios, donde la cifra de agentes penitenciarios retenidos por reclusos ha aumentado a 178. La situación en las prisiones complica aún más los esfuerzos por restablecer el orden en medio de la crisis desatada por el narcotráfico en Ecuador.
Fuente: Tribuna