Italia.- La Sociedad Italiana de Medicina de Emergencia y Urgencia (Simeu) ha lanzado una alerta crítica sobre la situación de los servicios de urgencias en los hospitales italianos, especialmente en Roma y su región, donde la cifra de pacientes en espera supera los 1.100, generando un escenario caótico y amenazando con colapsar los centros de salud.
El presidente de la Simeu, Fabio de Iaco, ha manifestado la extrema dificultad que enfrentan para garantizar el servicio. En el Piamonte, la espera alcanza los 500 pacientes, mientras que en Lombardía y Milán, las hospitalizaciones regulares han sido suspendidas temporalmente para liberar camas destinadas a las urgencias. Este aumento alarmante se atribuye al incremento de patologías respiratorias, especialmente entre los ancianos, donde la gripe y otros virus se suman a la presión asistencial ya existente debido a la pandemia de Covid-19.
Las camas hospitalarias crónicamente insuficientes complican aún más la situación. Aunque algunas regiones han activado planes para contrarrestar el hacinamiento, la realidad es que no se pueden crear camas adicionales de la nada. Esto ha llevado a retirar camas de otras especialidades, como cirugía, lo que, según De Iaco, no resuelve el problema de fondo.
El agotamiento del personal médico es otro factor crítico. Muchos profesionales del sistema sanitario público italiano no han tenido descanso, ni siquiera en las festividades de Navidad y Año Nuevo. De Iaco describe las vacaciones como un lujo, ejemplificando la situación en Turín, donde la gran mayoría de los médicos trabajaron sin interrupción durante todo el período festivo.
El llamado a la población italiana es claro: vacunarse. De Iaco destaca que aún no se han alcanzado los picos máximos de Covid-19 y gripe, esperados para la próxima semana, coincidiendo con la apertura de los colegios tras las vacaciones. La campaña de vacunación se presenta como una herramienta crucial para contener la propagación de ambas enfermedades.
Roma y la región de Lazio se encuentran en una situación particularmente crítica debido al aumento de casos gripales y al cierre del centro de Tivoli después de un grave incendio en diciembre. Consejeros regionales del Partido Demócrata han inspeccionado hospitales en la capital, constatando una situación muy compleja con ambulancias bloqueadas, operaciones aplazadas, urgencias obstruidas y camas ocupadas por pacientes de Covid-19.
Fuente: Tribuna