Estados Unidos. - En una impactante revelación, documentos recién revelados han arrojado luz sobre la operación de Jeffrey Epstein en su isla privada, donde proporcionaba ropa de Victoria's Secret a las mujeres llevadas allí, gestionando la propiedad como un burdel. Ghislaine Maxwell, conocida como la "mamá osa" por una víctima, aseguraba que hubiera mujeres jóvenes en rotación para Epstein, manteniéndolas listas para servir al pedófilo.
Sarah Ransome, una de las víctimas de Epstein y Maxwell, ofreció desgarradores detalles en su testimonio ante un tribunal de Nueva York. Describió la finca de Epstein en la isla como un burdel, donde las mujeres eran enviadas a la habitación del financiero en rotación bajo la apariencia de proporcionar "masajes", un eufemismo para actividades sexuales.
Nos llamaron para una visita rotativa de Jeffrey durante todo el día y la noche... Nuestra rotación cambiaba cada día ese viaje específico que teníamos en diciembre. Así, por ejemplo, me llamarían. Tal vez un par de horas, cuando Jeffrey tuvo un pequeño descanso, ya sabes, llamaron a otra chica", declaró Ransome.
La "mamá osa" Maxwell, según Ransome, era la encargada de gestionar la operación, tomando decisiones y asegurándose de que siempre hubiera otra mujer disponible para Epstein. También reveló que Epstein proporcionaba toda la ropa de las mujeres en la isla, incluyendo trajes de baño y ropa de dormir de Victoria's Secret.
Ransome, en sus declaraciones, mencionó que intentó escapar de la isla nadando, como una respuesta a las demandas de Epstein y Maxwell de que pesara menos de 56 kg. Además, explicó cómo las mujeres intentaban evitar ser llamadas para servir a Epstein, pero la "mamá osa" tomaba las decisiones.
Los documentos recién revelados, previamente sellados como parte de una demanda de 2015 entre Maxwell y una de sus acusadoras, Victoria Giuffre, añaden más detalles a la trama de abuso y explotación de Epstein. Las imágenes inéditas también han salido a la luz, mostrando a Maxwell descansando en la casa de Epstein en las Islas Vírgenes de EE. UU. en 2006, contradiciendo sus afirmaciones de que no estaba presente en ese momento.
Estos nuevos documentos son la cuarta ronda de materiales revelados, proporcionando más información sobre cómo Epstein utilizó sus conexiones para reclutar a sus víctimas y encubrir sus crímenes. A medida que se revelan más detalles, la presión sobre el FBI aumenta para publicar cientos de elementos de evidencia fotografiados durante una redada en la mansión de Epstein en 2019, pero que nunca fueron incautados.
La historia se complica aún más con acusaciones contra figuras públicas como Donald Trump, Bill Clinton y Richard Branson, aunque estas afirmaciones han sido desacreditadas y no hay evidencia pública que las respalde hasta ahora. La situación sigue evolucionando mientras se espera una mayor transparencia en las investigaciones en curso.
Fuente: Tribuna