Zambia.- El sábado 30 de marzo, un safari en Zambia se convirtió en una tragedia cuando un elefante macho embistió un vehículo todoterreno en el que se encontraban turistas, cobrándose la vida de Gail Mattson, una mujer de 79 años originaria de Estados Unidos. El incidente, que ha conmocionado a la comunidad, dejó además a otra mujer herida, quien fue trasladada a un hospital en Sudáfrica para recibir tratamiento.
La noticia de la muerte de Gail llegó a su familia a través de un enlace proporcionado por la embajada de Estados Unidos en Zambia el miércoles 3 de abril. Su hijo, Blake Vetter, describió a su madre como una persona querida por todos en la familia, destacando su amor por África y su deseo de pasar un mes en el continente. Vetter enfatizó que el incidente fue un "extraño accidente" y no culpó ni al elefante ni al conductor del safari.
El director ejecutivo de Wilderness, la empresa encargada de la conservación de la reserva natural donde ocurrió el incidente, confirmó que el vehículo embestido por el elefante transportaba a seis turistas y un guía, quienes estaban realizando una excursión para observar la vida silvestre en África. Keith Vincent descartó la posibilidad de una falla humana o negligencia por parte del personal, afirmando que todos los guías están bien capacitados y tienen experiencia.
Un video del momento del ataque, que circula en redes sociales, muestra el elefante africano macho galopando hacia el vehículo entre la maleza. Los turistas, al percatarse del peligro inminente, gritan de alarma mientras el guía intenta alejarse acelerando el vehículo. Sin embargo, el camino se bloquea, y el elefante embiste el automóvil, empujándolo con sus colmillos hasta voltearlo. El resultado fue devastador, dejando a la mujer de 79 años sin vida y causando lesiones a otra turista.
Este trágico incidente ha puesto de manifiesto los riesgos involucrados en los safaris y la importancia de tomar precauciones adecuadas al interactuar con la vida silvestre. Aunque este tipo de ataques no son comunes, sirven como recordatorio de la imprevisibilidad y la fuerza de los animales en su hábitat natural. Las autoridades locales y las empresas turísticas están trabajando para brindar apoyo a las familias afectadas y para garantizar la seguridad de los visitantes en futuras expediciones.
Fuente: Tribuna