Franja de Gaza.- Desde el pasado 7 de octubre del año pasado, el mundo entero ha sido testigo de un genocidio. Los ataques no han cesado y siguen cobrando vidas; esta semana, Israel volvió a lanzar misiles a Franja de Gaza. Ésta vez aterrizaron sobre campos de refugiados en áreas como Tal al Sultan y Mawasi, lugares que se suponía eran seguros y donde no se había ordenado la evacuación de la población civil.
El impacto más devastador ocurrió en un campo de desplazados de Tal al Sultan, donde el estallido de un misil seguido de un incendio provocó la muerte de 45 personas la noche del domingo. Israel se excusó diciendo que la agresión estaba pensada para asesinar a dos altos cargos de Hamás. Si bien la comunidad lo condenó, Israel lo calificó como un "trágico percance".
El Comité Internacional de la Cruz Roja dijo que su hospital de campaña en Ráfah estaba recibiendo una gran afluencia de heridos, y que otros hospitales también estaban acogiendo a un gran número de pacientes. Sami Abu Zuhri, alto cargo de Hamás, describió el ataque de Ráfah como una 'masacre' y responsabilizó a Estados Unidos de ayudar a Israel con armas y dinero.
Por otra parte, este martes el Ejército israelí emitió conclusiones preliminares sobre la tragedia en el campamento de desplazados de Barakasat, en Rafah, mencionó que la muerte de civiles fue resultado de un incendio provocado en un almacén de municiones perteneciente al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
El portavoz del Ejército, Daniel Hagari, en una conferencia de prensa, detalló que las fuerzas israelíes atacaron una estructura de Hamás ubicada a 180 metros de las tiendas de campaña y a más de un kilómetro y medio de una zona designada como segura para los civiles palestinos.
A pesar de nuestros esfuerzos por minimizar las bajas civiles durante el ataque, el incendio que estalló fue inesperado y no intencional".
El recuento de muertes en Gaza sigue en aumento, hasta el momento ha superado las 70 víctimas, según han reportado las autoridades locales en las últimas 48 horas. El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres no escatimó palabras al denunciar las acciones de Israel que resultaron en la muerte de decenas de civiles inocentes que, desesperados por protegerse, buscaban refugio en medio de este conflicto mortal. "No hay ningún lugar seguro en Gaza", declaró Guterres a través de su perfil en la red social X. "Este horror debe terminar", enfatizó.
Mientras tanto, han circulado imágenes que han desatado la indignación mundial.
Fuente: Tribuna Sonora