Washington, Estados Unidos.- Tras la renuncia de Joe Biden a la candidatura presidencial de los Estados Unidos, la actual Vicepresidenta Kamala Harris ha cobrado fuerza para ser la sucesora del actual mandatario estadounidense. Parece que la demócrata tiene el camino libre para ser la futura primer presidenta de la nación americana, esto después de que todos los detractores del Partido Demócrata se han alineado ante ella.
Kamala Harris se ha convertido en la principal opositora de Donald Trump y la virtual candidata del Partido Demócrata para derrotarlo en las elecciones de noviembre. En ese sentido, todos los demócratas que habían sido vistos como rivales de Kamala Harris han apoyado su candidatura, incluidos los gobernadores de Michigan, Gretchen Whitmer, el de California, Gavin Newsom, y el de Kentucky Andy Beshear.
Te podría interesar
Actualmente, Kamala Harris tiene solamente a 2 demócratas que podrían significar una competencia real en sus aspiraciones por la candidatura presidencial. Se trata del líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer, así como el ex presidente Barack Obama. En ese sentido, el ex mandatario aseguró que navegará en un terreno desconocido durante los próximos días. Por lo que no descartó la posibilidad de una nueva candidatura.
En el papel, Kamala Harris parece que no tiene rivales serios. Lo anterior no sólo por su preparación política y debido a que es la única Vicepresidenta en la historia de los Estados Unidos, sino también por su raza y su ascendencia surasiática, por lo que una minoría podría llegar a la silla presidencial por primera vez en la historia de la nación americana. Cabe destacar que tiene ideas que podrían serle de utilidad durante las elecciones.
Lo que ha llevado a tener un papel fundamental la Kamala Harris es su defensa en temas clave como el derecho al aborto, un asunto polémico en tierras norteamericanas. Asimismo, los partidos que la apoyan sostienen que ella. Podría atraer a los votantes más jóvenes y consolidar el apoyo de la comunidad negra, lo cual ha aportaría una gran capacidad de debate para enfrentarse a Donald Trump.
Fuente: Tribuna