Ciudad de México.- El pasado mes de junio, Adán Augusto López dejó su cargo como secretario de Gobernación y se sumó a la lista de "corcholatas" que han presentado sus renuncias para participar en el proceso interno de Morena, en el que se definirá quién será el próximo candidato a la presidencia de 2024. De los cuatro aspirantes, incluidos Marcelo Ebrard, Claudia Shienbaum y Ricardo Monreal; Adán Augusto López fue el último en anunciar su participación.
Hasta antes del 26 de agosto de 2021, a Adán Augusto no se le identificaba a nivel nacional; sin embargo, su nombramiento como secretario de Gobernación lo posicionó como la mano derecha del presidente Andrés Manuel López Obrador y perfilado como una de las “corcholatas” favoritas de dicho mandatario rumbo a las próximas elecciones de México. O al menos eso parecía hasta hace relativamente poco.
Y es que de acuerdo con diversos analistas políticos, el presente López Obrador buscaría bajar a su amigo de juventud de la contienda presidencial, como consecuencia de sus sonadas y constantes polémicas. Desde el arranque de su campaña, Adán Augusto se ha visto envuelto en escándalos, pero todos habían sido ignorados por el presidente, quien en todo momento guardó silencio sobre estos hechos.
- Las polémicas
La primera crisis que tuvo López Hernández fue el choque con César Yáñez, quien iba a coordinar su campaña, con Andrea Chávez, una diputada que presuntamente recibió consideraciones extraordinarias del todavía aspirante. El asunto terminó con el despido de Yáñez, pero esto solo fue el preludio de lo que vino después: fotografías de los viajes de la familia de Chávez en aviones del Ejército Mexicano, junto con videos de eventos donde sugerían una cercanía más allá de lo profesional.
López Obrador no actuó ni llamó a cuentas a su colega, tampoco lo hizo cuando en diciembre señalaron a Adán Augusto de posiblemente hacer activismo entre gobernadores, recaudando para su campaña fondos, que en ese momento se estimaban en 750 millones de pesos. Es así como los primeros síntomas de la molestia de López Obrador aparecieron cuando, tras las elecciones de Coahuila y Estado de México, le pidió a Adán Augusto que fuera el último de los aspirantes a sucederlo en presentar su renuncia.
Sin embargo, nunca presentó su renuncia, sino que le trasladó al presidente la decisión, esperando que fuera una licencia que le permitiera regresar, pero Andrés Manuel nombró en su lugar a Luisa María Alcalde. El tema que finalmente acabó con la tolerancia del presidente López Obrador fue el de los millonarios relojes. Desde al menos agosto de 2022, los medios de comunicación notaron los relojes de alta gama que Adán Augusto lucía, incluyendo uno valuado en 70 mil dólares.
A pesar de ello, continuó usando estos lujosos accesorios sin percatarse del posible daño que podía causar a su carrera política. En conclusión, todo parece indicar que esta serie de tropiezos, causaron el descontento de AMLO quien actualmente ya habría retirado su apoyo a Adán Augusto López como aspirante a la presidencia de México en 2024.
Fuente: Tribuna