Ciudad de México.- El Partido Acción Nacional teme por la sobrerrepresentación que adquirió el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en las Cámaras, tras recibir la mayoría de los votos en las elecciones del pasado 2 de junio. Ante este escenario, Marko Cortés, presidente del PAN, decidió alzar la voz y pedir la intervención del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la federación (TEPJF).
En la siguiente legislatura, que se renueva en septiembre 2024, Morena amenaza con ocupar 245 curules en la Cámara de Diputados, la mayoría calificada que les permitiría reformar la Constitución, según Cortés. Es por ello que ha exigido al organismo a regular esta situación e impedir que el partido ostente la mayor parte del poder en San Lázaro.
Cortés velaría por la integridad del Poder Judicial, el cual AMLO tiene en la mira para someterlo a cambios estructurales. De hecho, este forma parte primordial de la agenda de transición de gobiernos y fue hablado ayer con Claudia Sheinbaum durante la tarde de ayer, 10 de junio. En conferencia de prensa, la académica mexicana confirmó que será de los primeros temas que impulsen a la Cámara de Diputados para obtener aprobación de su parte.
De acuerdo con Cortés, en caso de implementarse la reforma, se debilitaría al Poder Judicial. Los objetivos de estos cambios, serían, de acuerdo con la Secretaría de Gobernación:
- Nueva integración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para que sea más eficiente, austera y transparente tratándose del máximo tribunal del país.
- Elección popular de ministros, magistrados y jueces, es decir, que cuenten con legitimidad democrática a partir del voto popular.
- Sustitución del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), para lo cual se propone no sólo dividirlo en dos nuevas instituciones, sino que realmente se garanticen instancias de vigilancia.
- Nuevas reglas procesales para que la justicia sea expedita, no más juicios interminables a través de amparos y resoluciones.
Entre las modificaciones se encuentra la reducción del número de ministras y ministros, de 11 a nueve integrantes. Además, el periodo de cargo disminuiría de 15 a doce años. Por otra parte, las sesiones se realizarían en pleno y deberán ser de carácter público para que todos tengan la posibilidad de conocer qué están determinando las y los ministros. Por último se les retiraría la pensión vitalicia.
Fuente: Tribuna Sonora