Chiconcuautla, Puebla.- Flor Itzel Cruz Aureles, de solo 6 años de edad, fue secuestrada y asesinada por sus propios familiares. Su cuerpo fue encontrado en un barranco y tenía un disparo en la cabeza. A dos años y medio del crimen, los responsables al fin recibieron sentencia.
Los hechos ocurrieron en octubre del 2018. El 23 de octubre, los padres de Flor Itzel reportaron su desaparición a la Fiscalía y activaron la Alerta Amber. La menor había sido vista por última vez en su casa.
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Tras dos días de búsqueda, Flor Itzel fue localizada muerta al fondo del barranco Ixhuacatla. La Policía arrestó a cuatro personas, dos de ellas medias hermanas de la madre de Flor Itzel y tías de la menor.
Según informes, Brisanet 'N' y Lidia 'N' planearon el secuestro de la niña con la intención de pedir rescate a los padres. Esto en complicidad con un hombre identificado como Alejandro 'N', pareja de Brisanet 'N', y Benjamín 'N', su suegro.
Luego de que no recibieran el dinero, estos la asesinaron y abandonaron su cuerpo. Al momento de su arresto, Brisanet 'N' tenía 20 años y su hermana Lidia 'N' 26. Alejandro 'N' tenía 20 y el padre de este, Benjamín 'N', 43 años.
Los ahora sentenciados fueron detenidos cuando se trasladaban en una camioneta y la Policía les pidió detenerse para revisarlos. Estos hicieron caso omiso y se enfrentaron a tiros con los oficiales.
Luego de someterlos, encontraron en la unidad dos escopetas, machetes y más objetos que habrían usado para secuestrar y matar a la niña.
Los detenidos fueron vinculados a proceso por el delito de secuestro agravado y un juez ordenó su ingreso a prisión. Este miércoles 12 de mayo, un juez encontró culpables a los cuatro y estarán el resto de sus días en la cárcel.
Fueron condenados a 87 años y seis meses de prisión, y a pagar 170 mil pesos por daño material y 141 mil pesos por daño moral.
Fuente: 24 Horas Puebla