Mapimí, Durango.- Gracias a un perro que paseaba con un cráneo humano entre los dientes, fue como los habitantes del poblado de San Agustín, del municipio de Mapimí, se percataron de la existencia de más huesos en la zona.
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La dueña del canino se puso en contacto con servidores de la línea de emergencias 911 y les explicó el caso, el cual movilizó a elementos de seguridad.
Uniformados adscritos a la Policía Estatal se dirigieron al lugar, donde dieron fe de lo relatado, por tanto, dieron parte al personal de la Vicefiscalía Región Laguna.
Peritos incautaron la mandíbula con piezas dentales, asimismo, otros restos que recuperaron en los límites de la propiedad de la denunciante.
Entre ellos, encontraron un fémur, del cual se ordenó la toma de muestra de ADN, el cual permitiría identificar a la víctima al comparar los perfiles genéticos de las personas desaparecidas en la Región Laguna.
Fuente: El Siglo de Torreón