Empalme, Sonora.- A escasos días de haber sido sepultado en el Panteón Municipal de la colonia Juárez en Empalme, la tumba del pequeño Kevin, de 10 años, quien perdiera la vida de manera trágica el pasado domingo, fue profanada por los 'amantes de lo ajeno' quienes se valieron de que esta se encontraba sin protecciones para sustraer una gorra y una bocina que se encontraban en el interior del sepulcro.
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De acuerdo a los primeros informes, los familiares del ahora occiso acudieron a visitar el camposanto para ofrecerle un rosario a su ser querido, fue entonces que se encontraron las losas de concreto que cubren el féretro con los restos del pequeño despegadas y dentro de la tumba ya no estaban las referidas pertenencias.
Trascendió que el menor fue sepultado la tarde del martes, pero antes de que le colocaran las losas de concreto selladas con mezcla de cemento y arena, unos familiares le depositaron su 'cachucha' preferida y la pequeña bocina con la que, dicen, acudía a todas partes.
Se presume que alguno de los presentes en el sepelio se dio cuenta de ello y aprovecharon de que la cimentación se encontraba fresca para allanar la tumba y robar los objetos.
Por lo anterior, la madre del extinto menor presentó su denuncia ante el Ministerio Público, a fin de dar con los responsables del robo.
Fuente: Redacción Tribuna