Ciudad de México.- La violencia y los delitos no conocen de razas, género o religión tal es el caso de un sacerdote, identificado como Abel “N” y su hermana Silvia “N” quienes fueron detenidos por su presunta participación en el secuestro de un hombre de 34 años, delito registrado en el municipio de Nezahualcóyotl, así lo informó la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
En ese sentido, a través de un comunicado, la dependencia mexiquense informó que el pasado 7 de septiembre la víctima y Abel “N” acordaron reunirse en dicho municipio. Sin embargo, el religioso privó de su libertad al hombre y lo trasladó a un inmueble ubicado en Ixtapan de la Sal, donde lo obligó a firmar unos documentos que acreditaban la propiedad de un vehículo particular.
Después de una denuncia realizada por los familiares de la víctima, personal de la Fiscalía estatal pudo identificar el inmueble localizado en la comunidad Coaxusco, donde presuntamente se encontraba el hombre privado de su libertad. Además, indicó que mediante un operativo realizado por elementos de la Policía de Investigación (PDI) de la Fiscalía Regional de Ixtapan de la Sal, con el apoyo de elementos de la Secretaría de Seguridad estatal, el hombre de 34 años fue rescatado.
En cuanto a las investigaciones, La Fiscalía del Estado de México explicó que las indagatorias revelaron que Abel “N” y la víctima se conocían, por ello acordaron reunirse. Cabe destacar que los implicados en el delito fueron detenidos y presentados ante el Agente del Ministerio Público (MP), quien inició la investigación respectiva y será el encargado de definir la situación jurídica de los presuntos delincuentes.
Después de la aprehensión, tanto el sacerdote como su familiar fueron ingresados al Centro Penitenciario y de Reinserción Social, donde quedaron a disposición de un juez de control, quien solo confirmó la legalidad de la detención y vinculó a proceso a ambas personas. Además, determinó un plazo de dos meses para terminar con la investigación complementaria, incluso como medida cautelar se impuso una garantía económica, así como la prohibición de aproximarse a la víctima.
Fuente: Tribuna