Celaya, Guanajuato.- En medio de ola de desapariciones y violencia que se vive en el país, reportan el hallazgo de cinco cuerpos con notables signos de violencia. De acuerdo con algunos informes, los restos de las víctimas habrían sido abandonados en las cercanías de la Universidad de Guanajuato (UG), en el campus de Celaya-Salvatierra. Si bien, las autoridades aún no lo han confirmado de manera oficial, se estima que los occisos podrían ser estudiantes de la casa de estudios, incluso se dice que uno de ellos fue identificado por su propia progenitora de como alumno de la carrera de medicina, esto según datos de algunos medios locales.
Los hechos ocurrieron aproximadamente a las 18:30 horas, del pasado domingo, 3 de diciembre, momento en el que se registró el reporte del hallazgo, mediante una llamada al número de emergencia (911). Los vestigios fueron localizados en un camino de terrecería, en la calle Lombardo Toledo y Albercas Don Cruz, con dirección hacia la comunidad de Santiago de la Cruz, sitio hasta el que arribaron elementos de la Guardia Nacional (GN) para confirmar la denuncia.
Según los cálculos del as autoridades, los occisos tendrían entre 15 a 30 años de edad y aunque no han sido identificados (de manera oficial) se estima que pudieron ser ejecutados, puesto mostraban lesiones de tortura y un disparo de gracia en la cabeza; sin embargo, dado a que se trata de un caso en desarrollo, por el momento se desconoce quién o quienes fueron los homicidas y cuál habría sido el móvil del crimen, motivo por el que las autoridades continúan realizando las investigaciones.
En determinado momento, arribaron agentes de la Policía Municipal (MP) de Celaya, junto con personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Guanajuato; la primera dependencia se encargó de resguardar la escena del crimen; mientras que los segundos comenzaron a recabar pistas en la escena del crimen. Más tarde, un equipo de peritos se encargaron de realizar el levantamiento de los cuerpos, mismos que fueron trasladados a un anfiteatro, donde se les realizaría la autopsia y se buscaría determinar la causa de muerte, lo que podría ayudar a identificar el móvil del crimen.
Cabe señalar que, existe la hipótesis de que las víctimas no habrían perdido la vida en el lugar del hallazgo, puesto los peritos no localizaron casquillos percutidos en la escena; mientras que los vecinos interrogados aseguraron que, en ningún momento, escucharon el sonido de la detonación de un arma de fuego, por lo que se estima que habrían sido asesinados en otro lugar y, posteriormente, habrían sido trasladados hacia el sitio de su encuentro.
Fuentes: Tribuna