Ciudad de México.- De nueva cuenta la violencia se apoderó de la Ciudad de México, ahora tocó el turno de la alcaldía Gustavo A. Madero, donde sicarios armados intentaron asesinar a un joven motociclista para después escapar, lo anterior generó una fuerte movilización de los servicios de emergencia; sin embargo, no se logró la detención de los responsables de los hechos, por lo que continúan las investigaciones del caso.
En ese sentido, de acuerdo con la información de las autoridades capitalinas, los hechos sucedieron en calles de la colonia Gabriel Hernández, en la alcaldía Gustavo A. Madero, donde un joven motociclista fue víctima de un ataque armado, en el cual sicarios armados intentaron asesinarlo a balazos, tras disparar su arma, los dos sujetos escaparon a bordo de un taxi con rumbo desconocido, las indagatorias continúan.
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Los hechos se registraron la tarde del lunes pasado, lo anterior después de que oficiales de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México (SSC-CDMX), fueran solicitados por una balacera en la avenida San Juanico, muy cerca de la Ampliación Luis Vargas, por lo que los elementos de inmediato se dirigieron al punto, solo para encontrarse con una terrible escena, ya que lograron localizar a la víctima de lo sucedido.
De acuerdo con el reporte oficial, los uniformados se acercaron al motociclista, un hombre de 26 años, cuya identidad es desconocida, quien se encontraba en su vehículo cuando dos sujetos armados se acercaron a él y sin mediar palabra, sacaron sus armas de fuego y le comenzaron a disparar. Tras ejecutar el ataque armado, los dos delincuentes abordaron un taxi, el cual arrancó a toda velocidad, sin que nadie los pudiera detener.
El joven cayó herido al piso, por lo que los policías solicitaron la presencia de una ambulancia, minutos más tarde arribó la unidad, cuyos paramédicos le brindaron los servicios prehospitalarios a la víctima, después de estabilizarlo lo trasladaron a un hospital cercano. En cuanto a la escena del crimen, quedó acordonada y bajo resguardo de los uniformados hasta la llegada de personal de la Fiscalía de la CDMX; quienes comenzaron con las investigaciones.
Fuente: Tribuna