Nicolás Romero, Estado de México.- Recientemente trascendió la noticia de que un grupo de vecinos de una localidad del Estado de México amarró a un perrito husky identificado como 'Kuko', al que le arrancaron la vida a golpes con el pretexto de que había intentado morder a uno de los habitantes de la comunidad, cuando la realidad es que el can tenía un ataque de epilepsia, lo que se confundió como un ataque al sujeto.
Los hechos ocurrieron en el fraccionamiento aguiluchos 13 el municipio de Nicolás Romero, en la mencionada entidad mexiquense. Según las investigaciones, 'Kuko' pertenecía a un hombre de la tercera edad, quien tiene discapacidad visual y auditiva, por lo que se encargaba de ser su guía; sin embargo, el día de los hechos, el canino salió de su casa e ingresó al mencionado lugar en busca de alguien para jugar.
Según algunos informes, 'Kuko' le habría mordido la mano a un individuo identificado como el 'güero', por lo que los vecinos salieron de sus casas con la finalidad de amarrar y golpear brutalmente al can. De acuerdo con las declaraciones de algunas personas que conocen al perrito, la realidad es que se trataba de un canino tranquilo y juguetón, el problema es que padecía epilepsia y cada vez que padecía estos episodios solía convulsionarse, los cuales podían confundirse como intentos de ataques.
Algunos informes de un periódico de circulación nacional, indican que 'Kuko' hizo todo lo posible por intentar morder el lazo que lo amarraba y así poder liberarse. En algún momento del brutal ataque, llegó una patrulla municipal, quienes con el apoyo de algunos elementos y testigos lograron liberar al can, puesto los enardecidos vecinos se negaban a dejar salir al husky del fraccionamiento, esto sin importar que el animal ya estaba gravemente herido.
Según algunas declaraciones, los miembros de la asociación Patitas a la obra rescataron a 'Kuko' con vida y lo llevaron en una patrulla a un veterinario, pero lamentablemente no logró sobrevivir debido a los golpes que le propinaron, siendo los más graves aquellos que recibió en el cráneo, por otro lado, su enfermedad complicó notablemente su estado de salud, por lo que fue imposible rescatarlo.
Hasta el momento, nadie ha emitido una denuncia formal por la desgarradora muerte de 'Kuko', y es que, como se mencionó anteriormente, el dueño del can no puede ver ni escuchar, por lo que el proceso podría llegar a ser complicado, aunque esto no ha impedido que algunos vecinos de la Nicolás Romero se manifiesten por las calles para exigir justicia por la muerte del Husky. Dado a que se trata de un caso en desarrollo aún no hay mayor información.
Fuentes: Tribuna