NARCOS EN MÉXICO

Narcos en México: Grupos criminales contaminan con desechos el Mar de Cortés

El Mar de Cortés es vulnerado por los cárteles, que a través de los derrames tóxicos de sus laboratorios comprometen su salud; encima, la droga producida genera adicciones y lastima al tejido social de sus habitantes

Grupos criminales contaminan con desechos el Mar de CortésCréditos: Internet
Escrito en SEGURIDAD el

Cajeme, Sonora.- La fabricación ilegal de drogas sintéticas en los estados de Sinaloa y Sonora ha derivado en la contaminación del Mar de Cortés debido a los derrames químicos que se producen en los narcolaboratorios ubicados a lo largo de la costa. De acuerdo con el informe “Región Mar de Cortés: amenazas sociales y ambientales del crimen organizado”, actualmente existe una estrecha relación entre la contaminación del agua y la fabricación de drogas, cuyos desechos tóxicos terminan en el agua o la bahía durante sus poco cuidados procesos de producción.

El reporte precisa que de 2012 al 2021, la región ha sufrido la contaminación del agua y del suelo por el vertido de, al menos, mil seiscientas toneladas de residuos contaminantes por la fabricación de mentanfetaminas. El investigador Francisco Cuamea Lizárraga, miembro de la Red de Expertos de Iniciativa Global, explicó que en la última década la situación se agravó por el cambio en el mercado de las drogas, donde las metanfetaminas sustituyeron a las drogas blandas. De hecho, la situación es tan grave que no sólo pone en riesgo al mar, sino también a las comunidades, la mayoría rurales. Los expertos señalan que los contaminantes usados en la fabricación de las drogas suelen terminar en los mantos freáticos y en los cuerpos de agua interiores.

Derrame en el Mar de Cortés. Foto: Internet

No es que todos nos vayamos a morir y a contaminar, sino que las poblaciones locales donde están los narcolaboratorios en las zonas rurales son las primeras que pueden sufrir el mayor impacto ¿por qué?, porque ahí no tienen plantas tratadoras de agua, beben directamente de la noria o de ahí sacan su agua, y si a eso le sumas la contaminación de las minas, estamos comprometiendo la vida sana, la salud de los pueblos, de las gentes que viven en las comunidades rurales”, dice Cuamea.

Gravedad

Entre lo que desechan los narcolaboratorios están sustancias comunes como combustibles y solventes: diésel y gasolina, así como acetines, ácido de baterías, líquido de frenos, barnices y lacas, amoniaco y refrigerantes para autos. Además, los criminales suelen echar mano de fertilizantes, éter, alcohol y mercurio, lo que potencia la posibilidad de contaminación a gran escala.

El tipo de contaminantes que hay son materiales duros, que les dicen. Para producir metanfetamina es un proceso químico, se utilizan químicos para producir la mezcla. La metanfetamina tiene como particularidad que puedes utilizar amoniaco, puedes utilizar químicos que puedes encontrar en el súper, en baterías de carro. Tú vas al super y te haces de químicos que vas a utilizar para producir metanfetamina”, dijo.

Daños severos

La zona del Mar de Cortés aporta hasta el 11 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de México, lo que detalla su valor social, económico y político. Pero esto se ve amenazado por la fabricación de drogas, la pesca ilegal, el tráfico de armas, la llegada de precursores químicos desde Asia, así como la influencia cada vez más marcada de los cárteles. Los datos oficiales revelan que en la última década se han desmantelado 974 laboratorios clandestinos en la zona; pero es en los últimos cinco en donde la cifra no sólo se aceleró, sino que las características de las fábricas cambiaron.

Los estudios especializados consideran que se han derramado dos kilos de contaminantes por cada 2.8 millones de hectáreas de humedales, lo que detalla el drama social que implica. Según datos analizados en el estudio de la Procuraduría Federal de la Protección al Ambiente (Profepa) el 38 por ciento de estos crímenes ambientales cometidos en el país de 2012 a 2021 tuvieron lugar en el Mar de Cortés.

Pero, además de contaminar el medio ambiente, el crimen organizado hace lo propio con el tejido social: cifras de la Secretaría de la Defensa (Sedena) señalan que mientras de 2012 a 2015 se incautaron en promedio 14 kilos de droga en las comunidades pesqueras, desde 2018 la cifra no ha parado de crecer, llegando a las 2.5 toneladas decomisadas en 2021 como récord.

Socialmente, el uso de drogas en las comunidades costeras ha pegado con tubo, pues los adictos crecen día con día, lo que ha provocado también violencia por la disputa de grupos del crimen por las zonas de venta. Particularmente en Sonora, la metanfetamina creada en los narcolaboratorios es la droga de mayor impacto desde 2014, siendo responsable del 76 por ciento de casos de adicciones según la medición realizada por las autoridades federales el año pasado.

Esto permite entender el año social, pues la droga ya ha rozado las más interiores fibras de la sociedad del Mar de Cortés, que además de estar contaminado debe atestiguar cómo quienes pueblan sus bahías están en las garras de los narcotraficantes. La contaminación, por tanto, es doble.

Fuente: Tribuna