Culiacán, Sinaloa.- La noche del 9 de diciembre, en la colonia 21 de Marzo en Culiacán, Sinaloa, un ataque armado dejó como víctimas mortales al youtuber Leobardo Aispuro, conocido como ‘Gordo Peruci’, y a su esposa, Brenda “F”. El atentado ocurrió cerca de las 21:00 horas, a pocos metros de su domicilio. Aunque Brenda resultó herida inicialmente, falleció más tarde mientras recibía atención médica.
Horas antes de este trágico suceso, Leobardo había compartido dos videos en su canal de YouTube, que cuenta con 159 mil suscriptores. En el primero, publicado alrededor de las 14:00 horas, denunció el robo de luces decorativas navideñas que había instalado en el exterior de su casa. Según narró, descubrió el robo al regresar del gimnasio por la mañana.
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A pesar de tener cámaras de seguridad en su vivienda, el creador explicó que estaban desconectadas. Explicó que esto se debía a que atendió rumores que sugerían apagarlas para evitar problemas relacionados con la publicación de videos en Culiacán El segundo video fue publicado unas seis horas después e incluía un momento más cotidiano: Leobardo apareció junto a amigos, también reconocidos en redes sociales, participando en un juego que consistía en romper globos para ganar premios.
¿Quién era?
Era un popular creador de contenido en redes sociales, con más de 300 mil seguidores. Su actividad se centraba en su canal de YouTube, videos en TikTok y publicaciones en Instagram, donde compartía principalmente contenido humorístico que incluía bromas con sus amigos, dinámicas en las calles donde regalaba dinero o cervezas, y colaboraciones con otras celebridades de Internet.
Dicho asesinato se suma a los ocurridos durante la ola de violencia que atraviesa Sinaloa a raíz de la confrontación entre 'Los Chapitos' y 'La Mayiza'. En los últimos tres meses, los enfrentamientos han dejado un saldo de 535 homicidios y cerca de 900 personas desaparecidas, según datos de la Fiscalía estatal y colectivos de madres buscadoras. Sin embargo, el número real de víctimas podría ser aún mayor, ya que muchas bajas en los enfrentamientos entre los grupos criminales no son reportadas.
Fuente: Tribuna Sonora