Colima, Colima.- El 6 de diciembre, un agente de seguridad fue asesinado en un ataque armado en la colonia Nuevo Milenio III, en el municipio de Colima. La víctima, un elemento de la Policía Estatal Preventiva (PEP), fue baleado mientras se encontraba en la calle Pico de las Nieves. La noticia del homicidio trascendió a los medios locales, pero la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Colima lo confirmó al día siguiente.
A pesar de que se desplegó un operativo en la zona tras el ataque, hasta el momento no se ha detenido a ningún sospechoso ni se han establecido las posibles causas del crimen. El Gobierno del Estado de Colima condenó el crimen y aseguró que la familia del oficial recibiría todo el apoyo necesario, además de otorgárseles el seguro de vida y la pensión correspondiente. Además, se confirmó que la Fiscalía estatal llevará a cabo las investigaciones para esclarecer lo sucedido.
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Este crimen se suma a otro similar ocurrido también en Colima se confirmó la muerte de un oficial de la Dirección de Seguridad Pública y Vialidad de Cuauhtémoc. Un día antes, se había encontrado un cuerpo sin vida en la carretera Colima-Guadalajara, en el tramo de Cuauhtémoc, que fue identificado como el policía Julio César Romero Álvarez. El ayuntamiento emitió un comunicado en el que lamentó el deceso del oficial. "Su partida deja un vacío en nuestra institución y en la comunidad a la que dedicó su labor con esfuerzo y dedicación", se podía leer.
Asesinato de elementos de seguridad
Entre el 1 de octubre y el 28 de noviembre de 2024, la organización Causa en Común reportó el asesinato de 56 policías en México, de los cuales 29 eran municipales y 27 estatales. Las entidades con mayor número de policías asesinados fueron Tabasco con ocho, Guanajuato y Sinaloa con siete cada uno, y Guerrero con seis.
En menor cantidad, Zacatecas registró tres policías asesinados, mientras que Colima, Baja California Sur, Veracruz y Puebla reportaron dos. Jalisco, Oaxaca, Aguascalientes, Sonora y Chihuahua sumaron un caso en cada uno. De este total, dos eran mujeres, ocho eran ministeriales, uno de tránsito y el resto pertenecían a otras divisiones policiacas. Además, 16 de los asesinados no estaban en servicio al momento de su muerte, y cuatro eran expolicías.
Fuente: Tribuna Sonora