León, Guanajuato.- Era la tranquila hora de las tres de la mañana cuando un suceso violento sacudió el silencio de la calle Sierra de San Pedro, a pocos metros del transitado bulevar Mariano Escobedo. Un hombre, cuya edad se estima entre los 25 y 30 años, se encontraba en el interior de un departamento marcado con el número 104 cuando lo abordó un par de delincuentes. Según las primeras versiones de los testigos, dos individuos a bordo de una motocicleta irrumpieron en la quietud de la noche para desencadenar un episodio de terror. Los presuntos sicarios ingresaron al inmueble y, en cuestión de minutos, el sonido de los disparos rompió el aire, despertando a los vecinos de la zona.
Conmocionados por el estruendo, los residentes de la colonia Hilamas llamaron de inmediato a la central de emergencias 911, buscando auxilio ante la violencia desatada en su vecindario. Pronto, policías municipales y paramédicos acudieron al lugar, pero lamentablemente, solo pudieron confirmar la peor noticia: la víctima había perdido la vida. Dentro del departamento, las autoridades hallaron más que solo el rastro de un crimen. Fuentes cercanas a la investigación revelaron el hallazgo de varias dosis de presunto cristal y una suma considerable de dinero en efectivo. Estos elementos, considerados parte del entramado del crimen organizado, fueron asegurados para las investigaciones correspondientes.
Violencia en León
La ciudad de León, Guanajuato, enfrentó una escalada preocupante de violencia el mes pasado que dejó un saldo de 63 homicidios dolosos. Según el recuento de cifras, marzo fue convierte en el tercero más violento en el primer trimestre del año, a reserva de que se den a conocer los datos de abril. De acuerdo con el informe, durante el primer trimestre se contabilizaron un total de 213 homicidios, siendo enero el mes más violento con 82 casos, seguido por febrero con 68 y marzo con 63. Entre las colonias más afectadas por esta ola delictiva se encuentran Las Joyas, Castillos, Joyas de Castilla, San Marcos, Flores Magón, así como las comunidades de Barretos, Nuevo Lindero y Los Ramírez.
A pesar de la presencia constante de efectivos federales, la colonia Brisas del Campestre continúa siendo un foco rojo, pues la delincuencia ha cambiado su modus operandi, optando por dejar cuerpos embolsados en lugar de recurrir a los asesinatos con armas de fuego. Esta tendencia al alza en la violencia preocupa a las autoridades locales y a la población, quienes claman por medidas efectivas para garantizar la seguridad en las calles de León.
Fuente: Tribuna Sonora