Hermosillo, Sonora.- Un individuo identificado como Ramiro Enrique 'N', de 29 años de edad, fue arrestado debido a su probable responsabilidad por el delito de exhumación de cadáveres, en hechos cometidos en un cementerio de Hermosillo, reveló este viernes la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES). Un juez de control lo vinculó a proceso y le impuso prisión preventiva justificada como medida cautelar.
El sujeto fue capturado por elementos de la Policía Municipal el pasado 3 de junio en el interior del Panteón Yáñez, ubicado en las calles Israel González y Periférico Norte, quienes atendían un reporte por la presunta exhumación de de dos cuerpos. Al verse sorprendido por los elementos de Seguridad Pública, el sujeto arrojó al suelo los restos de dos personas. El primer respondiente puso a disposición al detenido ante el Ministerio Público.
Dicha autoridad inició las investigaciones y logró recabar pruebas para acreditar la probable autoría del señalado en el crimen. Ante esto, un juez determinó vincular a proceso a Ramiro Enrique 'N', quien fue internado en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Hermosillo bajo la medida cautelar de prisión preventiva justificada, a la espera de que se realicen las diligencias subsecuentes que indica el proceso penal.
Cabe mencionar que recientemente se denunció en el saqueo de tumbas y vandalismo en los panteones de San Fernando y Héroes Civiles de Guaymas, donde hay desde tumbas y cajones de difuntos abiertos, así como epitafios y cristales quebrados. Ciudadanos que tienen a sus seres queridos sepultados, piden que la alcaldesa reelecta, Karla Córdova, aplique un programa preventivo y de vigilancia permanente para que no se sigan deteriorando los camposantos.
Juan Zúñiga, vecino del fraccionamiento Ocotillo contiguo al panteón de Héroes Civiles dijo que en ocasiones se ven personas saliendo con piezas de metal en el día para venderlas en las chatarreras y por las noches entra gente a hacer rituales de magia y hasta ataúdes se han llevado. Precisó que debido a la falta de operativos de seguridad los delincuentes aprovechan la oportunidad para llevarse el metal, el cobre y lo que consideren que se pueda vender, destrozando las tumbas.
Fuente: Tribuna y FGJE Sonora