Ciudad de México.- Hace una semana, México se paralizó. Alrededor de las 14:00 horas, tiempo del centro, se reportó una gran tragedia: un pipa que transportaba gas se accidentó en el Puente de la Concordia, en la alcaldía Iztapalapa, lo que provocó una gran explosión que incendio vehículos y lesionó a decenas de personas. El presunto responsable del siniestro habría sido el chofer de la unidad de carga, Fernando Soto Munguía, de 34 años; sin embargo, las autoridades confirmaron su muerte.
La noche del martes 16 de septiembre, en el último reporte sobre el estado de salud de las víctimas por la explosión de la pipa de gas en Iztapalapa, la Secretaría de Salud de la Ciudad de México (CDMX) confirmó el fallecimiento de Fernando Soto Munguía, conductor del tractocamión que estalló en llamados el pasado miércoles 10 de septiembre de 2025.
El ahora fallecido permanecía internado bajo custodia en el Hospital de Traumatología 'Victoriano de la Fuente Narváez', donde recibía atención médica tras el siniestro que dejó un saldo trágico para la capital mexicana. Con él, la cifra total de víctimas mortales del incidente se mantiene en 19.
Por otra parte, las autoridades capitalinas señalaron que 32 personas afectadas por el siniestro continúan hospitalizadas, mientras que 33 han sido dadas de alta tras recibir atención médica especializada. Señalaron que se mantienen abiertas las investigaciones para esclarecer los detalles que provocaron la explosión y determinar responsabilidades.
Cabe señalar que el peritaje realizado por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) estableció que la volcadura de la pipa, propiedad de la compañía Silza, se debió a la combinación de exceso de velocidad y falta de pericia del conductor. El dictamen indica que Soto Munguía circulaba a aproximadamente 50 kilómetros por hora en una zona donde la velocidad máxima permitida es de 40 kilómetros por hora.
Durante su recorrido, el conductor perdió el control de la unidad al ingresar a una glorieta, provocando la posterior volcadura y explosión. El informe pericial destacó que el manejo del tractocamión se efectuó "sin la suficiente capacidad técnica", ya que el conductor no mantuvo el control direccional ni respetó el carril de circulación correspondiente. Además, se precisó que las condiciones del pavimento eran normales, sin obstáculos como baches o topes que pudieran haber contribuido al accidente.
Sin embargo, tras confirmarse el deceso del chofer, no se ha confirmado si los responsables serán los dueños de la empresa o qué procederá.
Fuente: Tribuna del Yaqui
