Cozumel, Quintana Roo.- La detención de un militar en Cozumel, identificado como Jairo 'N', fue confirmada por las autoridades de Quintana Roo en conexión con un grave caso de abuso en contra de una niña de 9 años de edad. El presunto delito, que ha generado una fuerte reacción en la comunidad, habría ocurrido dentro de las instalaciones de una guarnición militar, un espacio que debería ser de máxima seguridad. La víctima es una menor que se dedicaba a la venta de alimentos en la zona.
El arresto fue resultado de un operativo coordinado entre diversas corporaciones, incluyendo la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), la Fuerza Aérea, la Guardia Nacional y la Dirección de Seguridad Ciudadana de Cozumel. Esta colaboración interinstitucional deja ver la seriedad con la que se ha abordado el caso desde su conocimiento. La gobernadora del Estado, Mara Lezama, fue quien hizo pública la confirmación del arresto, destacando la importancia de una respuesta rápida y conjunta.
En cuanto a la víctima, la Fiscalía General del Estado informó que recibió atención médica inmediata y se le realizaron los estudios periciales correspondientes para la integración de la carpeta de investigación. De forma paralela, se activaron los protocolos de protección a menores, con instituciones especializadas como el Sistema DIF y el Grupo Especializado de Atención a la Violencia Familiar y de Género (Geavig) brindando acompañamiento psicológico y legal tanto a la niña como a su familia.
El proceso judicial ya está en marcha. Se ha establecido que el próximo 7 de septiembre un juez de control definirá la situación jurídica de Jairo 'N', fecha en la cual se espera que sea vinculado a proceso por los delitos que se le imputan. La respuesta de la cúpula militar local no se hizo esperar. El general Brigadier, Armando Toscano Yáñez, declaró que se inició una investigación interna y aseguró que todo el material de videovigilancia de la guarnición fue puesto a disposición de la Fiscalía para facilitar la identificación del responsable.
Este suceso provocó la movilización de ciudadanos en Cozumel, quienes se congregaron en las afueras de la base militar para manifestar su indignación y exigir una respuesta contundente y justicia para la víctima. Finalmente, la gobernadora Lezama emitió un mensaje reiterando una política de cero tolerancia. "En mi Gobierno no habrá impunidad ni tolerancia frente a ningún acto de violencia contra niñas, niños y adolescentes", afirmó, y concluyó que la protección de la niñez es una prioridad absoluta para su administración en Quintana Roo.
Fuente: Tribuna
