Ciudad Obregón, Sonora.- Tas una difícil lucha contra el cáncer, Aislyn y Julia dieron un 'campanazo' por la vida, acompañadas de pequeños guerreros y guerreras pertenecientes a la Fundación Jesucristo Misericordioso en Ayuda Para Niños contra el Cáncer A.C, durante una reunión en la que ellos y sus familiares elevaron sus plegarias al cielo y conmemoraron su valiente lucha.
Aislyn y Julia, de 10 y 12 años de edad, celebraron su triunfo contra el cáncer infantil, tocando la campana por la vida en la fundación.
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Me encuentro muy feliz porque finalmente logré curarme. Festejamos, tocamos la campana y arrojamos globos al cielo. Me encuentro en compañía de mi mamá, mi papá y mi hermano", expresó la valiente guerrera de 10 años, Aislyn mientras esbozaba una sonrisa.
A su lado, Magda Yuridia Acosta, madre de la niña, contó su experiencia.
"Estoy muy feliz porque logramos vencer en esta lucha, siempre tuvimos fe en que esto pasaría y ahora llegó el momento tan esperado. El diagnóstico de mi hija fue un tumor en el lado izquierdo de su brazo. Se nos ofrecieron posibilidades para que ella lo conservara y al final se le puso una prótesis. Fue un camino difícil, pero tenemos una inmensa alegría de verla triunfar", dijo Magda Yuridia.
Asimismo, la madre de Aislyn envió un mensaje a todas aquellas personas que tienen algún familiar enfermo de cáncer.
Deben ser muy fuertes y tener mucha fe en Dios. No deben perder la esperanza y deben seguir orando".
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Por su parte, Julia, de 12 años de edad, también dijo estar agradecida con todos los que la apoyaron en su lucha y tener una inmensa felicidad al vencer el cáncer.
Me siento con mucha emoción y mucha alegría. A los demás niños les digo que le echen muchas ganas", expresó la valiente menor.
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"Tocamos la campana el día de hoy agradeciendo que a fin mi hija se logró curar. La verdad es que el proceso fue muy difícil. Le doy gracias a Dios por darle tanta fuerza a mi niña para no quedarse en el camino y seguir adelante. Toda la familia estamos muy felices y mi mensaje para todas aquellas madres, padres y familiares es que luchen, que no se cansen de hacerlo jamás", dijo Alma Adelia, madre de Julia.
Fue así como, posterior al 'campanazo' por la vida y después de elevar sus plegarias y agradecimientos al cielo por medio de globos de colores, niños y padres realizaron un pequeño festejo con todos los protocolos para prevenir contagios.
Érika Ayón, directora de la fundación agradeció al personal de oncología, así como a los familiares de los niños por apoyarlos en todo momento para realizar sus sueños.
"Todo lo que estamos recibiendo es salud. Es un honor ser parte de este duelo de nuestros guerreros. Sabemos que es muy difícil esta lucha pero queremos que sepan que los apoyamos y que no están solos nunca. Esta es su segunda casa y agradecemos a nuestro señor Jesucristo por la victoria de estas dos niñas y la batalla de nuestros valientes niños", concluyó.
Fuente: Tribuna