Ciudad Obregón, Sonora.- Durante muchos años, las autoridades y sociedad se han olvidado de lo importante que es cuidar el medio ambiente, lo que no solo se traduce en la rehabilitación de áreas verdes y campañas para recoger basura, sino también en el análisis de qué hacer y cómo mejorar. Este problema se vive especialmente al hablar de la calidad del aire, porque aunque no se crea ya existe una problemática.
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De acuerdo con el ‘Programa de gestión para mejorar la calidad del aire del estado de Sonora 2017-2026’, presentado por la comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (Cedes), Cajeme representa un 12 por ciento de contaminantes PM10 (Partículas menores a 10 micrómetros), por actividades de labranza agrícola, caminos no pavimentados y quemas agrícolas; de todo el estado, así como el 15 por ciento de monóxido de carbono, agentes contaminantes que influyen directamente en la calidad del aire.
Un problema sin rumbo
Juan Carlos Gil, subdirector de gestión ambiental y ecología en el municipio, reconoció que falta mucha información para poder actuar y crear un análisis real del problema. Esto pese a que existe un Reglamento en Materia de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente para el Municipio de Cajeme, el cual no se cumple.
Cuando llegamos a esta administración, nos dimos cuenta de que hace falta mucha información para poder actuar, y no queremos actuar sin información, por lo cual queremos emular lo que pasa en Hermosillo, donde si tienen un análisis de la calidad del aire, para este primer y segundo trimestre del año, tenemos el objetivo de poder medir el número de partículas suspendidas en el área urbana y rural, la importancia de tener estos datos radica en que de nada sirve producir cierta cantidad de árboles si no sabemos cuántos hacen falta", declaró.
Cajeme ‘sin pulmones’
Francisco Alejandro Elías González, consultor ambiental, detalló que dentro del reglamento existen muchas acciones que se deben de realizar para tener un control adecuado de la calidad del aire, pero que en la práctica no se llevan a cabo. “Una de estas medidas es la de tener instrumentos de medición que ayuden a mejorar la calidad del aire”.
El problema se intensifica cuando vemos que, en el Valle del Yaqui, se cuenta con agroquímicos que son dañinos para la salud, y aunque se pudiera creer que se usan lejos de la ciudad, los mismos vientos la traen a la urbe, incluso aquí mismo, todos los vehículos, empresas, generan contaminantes, por lo cual la autoridad debe de observar los mecanismos para atender esta problemática", explicó.
El experto compartió que la mala calidad del aire, surge en parte por la falta de áreas verdes que oxigenen la ciudad, ya que según dio a conocer, solamente se cuenta con la zona de la laguna del Náinari y el bulevar Rafael Ramírez, como “pulmones” para la ciudad.
Para minimizar el impacto de estos contaminantes, es importante tener y saber ubicar espacios con árboles y arbustos, que por un lado capturan el monóxido de carbono, que además de ser un contaminante, genera un efecto invernadero, y por otro se genera una barrera contra otras partículas”, señaló.
Finalmente, aclaró que la mala distribución o falta de mantenimiento de los parques y jardines, no genera el impacto que debería tener en la ciudad, “Fuera del bulevar y la laguna, se tienen parques esporádicos, pero en la zona sur de la ciudad estos ya parecen lotes baldíos, de ahí la importancia de que la ciudadanía se comprometa a tener un cuidado e involucrarse cada vez más en el tema ambiental”.
Salud, los perdedores
José Luis Villa, médico particular, informó que el respirar continuamente partículas contaminantes acarrea una serie de efectos adversos, que afectan la calidad de vida de la ciudadanía especialmente en los niños, mujeres en gestación y adultos mayores, así como a las personas con enfermedades preexistentes.
En Ciudad Obregón, es urgente mejorar la calidad del aire que respiramos es absolutamente necesario para nuestra salud, lo cual también se verá reflejado en la acción climática; entre las afectaciones destacan síntomas respiratorios, así como disminución de la función pulmonar, predisposición a infecciones respiratorias y aumento de cuadros asmáticos", finalizó.
Fuente: Staff