Guaymas, Sonora.- Los hechos delictivos de alto impacto que no han dado tregua en Guaymas y Empalme estarían poniendo en ‘riesgo’ las inversiones que se tienen en puerta en la región, específicamente las que se refieren a la iniciativa privada.
De acuerdo a conocedores y académicos del área de economía, los inversionistas ven con temor los hechos que se están presentando, los cuales no le da certidumbre a su capital, por lo que no estarían dispuestos a arriesgar.
- Hay miedo
Juan Rentería, catedrático universitario precisó que por una parte, la gente sale menos a la calle, y por ende las ventas en los comercios tienden a disminuir.
Asimismo, dijo por otra, como va ganando terreno la delincuencia, no falta mucho para que las organizaciones criminales empiecen a exigir la ya conocida cuota por ‘protección’, que se dice, ya se han dado casos y los comerciantes por temor prefieren no denunciar a las autoridades.
- En riesgo
Por todos es sabido que, sobre todo en Empalme, ya van varios los casos de secuestros que se han registrado de empresarios o sus hijos, a los que los delincuentes piden fuertes cantidades de dinero por liberarlos, y eso no ha pasado desapercibido por los inversionistas.
En lo que toca a la ciudad rielera, se tienen en puerta la llegada de franquicias internacionales del ramo de café, nieves, pizzas y hasta un cine, entre otras, por lo que no sería para nada agradable que por la delincuencia cancelaran y se fueran a otro lugar.
- Hay temor
Ignacio Arrellano, comerciante de Guaymas expresó que la mayoría de los locales han reducido sus horarios y la mayoría están cerrando a las 7 de la tarde.
Por la inseguridad, entre los empresarios y pequeños comerciantes, hay temor que sufran daños colaterales por las balaceras que en los últimos días, se han presentado en la avenida principal del Puerto", detalló.
En Guaymas hace dos años se anunció un enorme centro comercial en el sector norte, pero la inversión está detenida por la inseguridad que se vive en el Puerto, señaló un regidor que conoce a los inversionistas.
Fuente: Tribuna