Ciudad Obregón, Sonora.- Debido a la pandemia, la comunidad artística se ha visto forzada a mudarse a los espacios digitales para compartir sus obras y talentos, sin embargo, las herramientas tecnológicas no están cumpliendo con las expectativas de algunos creadores.
“Suele ser difícil adaptarse a nuevos formatos para quien practica la danza o el teatro, pues estas artes escénicas necesitan de un espacio óptimo para que se lleven a cabo”, explica la doctora Grace Rojas, quien ha fungido como coordinadora de la carrera de Gestión y Desarrollo en las Artes del Itson.
La actual docente de arte terapia y de danza regional mexicana asegura que las herramientas tecnológicas brindan facilidades a creadores y consumidores del arte, pero también menciona las dificultades que son cada vez más frecuentes entre los difusores culturales y el público en general.
Con los formatos digitales, diversos tipos de expresiones artísticas llegan a lugares que suelen ser más inaccesibles, sectores como lo son las comunidades que se encuentran más aisladas”, asegura.
Sin embargo, algunas disciplinas se ven más beneficiadas que otras al momento de unirse a la era digital, pues es necesario señalar el hecho de que una obra de teatro, concierto, galería o taller artístico que se tome de manera digital, “se verá obstruido por las limitaciones físicas”.
- La compatibilidad de los artistas con la tecnología
Aunado a las declaraciones de Grace Rojas, la artista plástica y docente Elsa Cacho comparte: “Para muchos artistas y espectadores, lo presencial siempre es mejor, ya que esto aporta una experiencia única” pues un evento en directo es inmersivo y cautivante.
Las herramientas digitales siempre fungen como algo útil para conectar artistas de todo el mundo, hace fluida la comunicación y la difusión entre sociedades”.
Por otra parte, sin importar la disciplina de la que se hable, el factor de edad llega a ser también un impedimento en el quehacer de compartir arte. La pintora Perso Arana, quien forma parte de la Agrupación Para Las Bellas Artes, señala que para los adultos mayores o incluso de mediana edad, llega a ser complicado unirse a la era digital:
Desde luego que es difícil para ellos, para uno, nunca va ser sencillo, adaptarse no es fácil, pero bueno, para todo podemos encontrar una forma”, dice Perso.
Además, la perspectiva del artista también se ve afectada por la adaptación a los medios: “nunca se va apreciar de la misma forma en persona que por la computadora, por eso muchos artistas no quieres exponer en digital”.
La conclusión a la que llegan las artistas y gestoras, es que es importante reconocer que con la tecnología el arte puede llegar más lejos, pero quienes no tienen este acceso quedarse en casa encerrado con su pintura es el destino más probable; si bien la comunidad artística ya se ha cansado del formato híbrido, a las exposiciones presenciales “siempre van las mismas personas”, dice Arana, de modo que los beneficios del formato híbrido no pueden ser aprovechados por todos.