Cajeme, Sonora.- En un riesgo latente y calificada como una “pesadilla” constante, es como vive un numeroso grupo de habitantes en el sector Centro, en Cajeme, al pasar diariamente por esa zona habitacional cientos de vehículos de carga pesada que ponen en riesgo su patrimonio y salud. A nueve meses de iniciar la reconstrucción del acceso al recinto portuario, donde diariamente movilizan miles de toneladas de cargas diversas, la vía alterna utilizada, hoy surte efectos negativos que redunda que diversas voces exijan celeridad en la obra y terminar con su zozobra.
Esta semana existieron dos accidentes en la zona donde tráilers fueron protagonistas: primero un conductor derribó dos postes de Telmex, dejando sin servicio por más de 12 horas a los residentes del sector. Mientras que el miércoles hubo una ‘carambola’ de tres tráilers, después que uno se quedara sin frenos al bajar la calle 25, afortunadamente sólo fueron pérdidas materiales.
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Nueve meses
Fue en septiembre cuando se puso en marcha la obra de accesibilidad al Puerto con vialidades contiguas para el ingreso de mercancías y alcantarillado donde se invierten 123 millones de pesos. Hace 15 días el secretario de Infraestructura y Desarrollo Urbano (Sidur), Heriberto Aguilar dijo que la obra llevaba un 70 por ciento de avance. Pero, vecinos de Punta Arena señalan que a la obra le falta mucho más y difícilmente podrán terminarla en diciembre como está programada.
Latente tragedia
El retraso de la obra mantiene impacientes a los residentes del sector Centro, que piden a las autoridades agilicen labores y no suceda una desgracia en la zona habitacional donde diariamente transitan los tráilers con toneladas de materiales y hasta con doble góndolas. Felipe Hernández, vecino del sector relató molesto: “primero los postes de teléfono que derribó un tracto camión, cuyo conductor se dio a la fuga y luego el choque por alcance de dos tractocamiones todo ello en la calle 25”.
El afectado dijo “que están esperando las autoridades que suceda una tragedia, debemos recordar que por la zona donde pasan los tráilers, hay dos escuelas y muchos niños se encuentran expuestos, ojalá no sucede algo que lamentar”.
Daños en viviendas
En un recorrido hecho por el sector, algunos residentes molestos señalaron que los camiones de carga no deberían de circular por ahí y mostraron daños que afirman, han sido provocados por las vibraciones de los enormes vehículos pesados, donde hasta han ocasionado que vidrios de ventanas se quiebren. El problema comenzó cuando se decidió que calle 26, sería una vía alterna temporal para la salida de vehículos de carga pesada del Puerto. Pero la marcha de tráilers, pipas, ‘tortons’ y dompes cargados de diversos materiales mantienen ‘enojados’ a los vecinos, ya que con las vibraciones se comienzan a cuartear paredes y techos de las viviendas, aunado a que algunas son construcciones antiguas hechas con adobe y son habitadas por personas de la tercera edad.
Adriana Martínez, vecina afectada reveló que las paredes y techos de una recámara donde duerme su hijo adolescente comenzaron a cuartearse. Mientras Gustavo Valle, de oficio carpintero, que tiene su taller en la esquina de la calle 26 y avenida 18 relató que durante el día pasan muchos tráilers “pero el tránsito fuerte comienza a partir de las 7 de la tarde, y existe una ‘pasadera’ dura toda la noche y madrugada”.
Cabe destacar que en su anuncio oficial se informó a los vecinos y a la comunidad en general que las molestias por la desviación provisional durarían 90 días, pero actualmente ya suman nueve meses.
Desplomes
Alejandro Medina, ingeniero civil y especialista en venta inmobiliaria refirió que las viviendas de la calle 26 están sufriendo un daño constante por las vibraciones, corriéndose el riesgo que se presenten desplomes de estructuras que no estén bien cimentadas. Dijo que esos vehículos que transportan grandes toneladas de materiales, no son para que transiten en zonas habitacionales, no se debe permitir, se deben buscar otras opciones de vialidad.
Callan
Se buscó para conocer la versión sobre los daños en las viviendas y diera a conocer el avance de la obra a Rogelio Bello Aguilar, director general de la Administración del Sistema Portuario Nacional Guaymas (Asipona), pero su secretaria refirió que se encontraba en junta y que no atendería a medios de comunicación. Por su parte, Tránsito Municipal acusó que no cuenta con los suficientes elementos para mantener una vigilancia en la zona las 24 horas, ya que actualmente la prioridad son las zonas escolares.
Fuente: Tribuna