Ciudad de México.- El árbitro electoral conocido como Instituto Nacional Electoral (INE) es un factor clave este 2 de junio, sin embargo durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha sido amenazado con desaparecer, tal como se le conoce hoy en día.
Las confrontaciones entre el INE y AMLO comenzaron desde principios de sexenio, cuando los ahora exconsejeros electorales, Lorenzo Córdova y Ciro Murayama eran parte del organismo electoral. Desde el ejecutivo, López Obrador puso en marcha lo que sería el primer intento de “transformar” al instituto, a ello se le conoció como el Plan A.
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El Plan A
Fue el 28 de abril de 2022 cuando AMLO propuso una Reforma Electoral que pretendía cambiar al INE al Instituto Nacional de Elecciones y Consultas y además cambiar las reglas con las que operan los partidos políticos. Se planteó eliminar cuatro de los 11 consejeros electorales, eliminar el financiamiento a partidos políticos para actividades ordinarias y desaparecer a los llamados legisladores plurinominales.
López Obrador buscaba que el Instituto Nacional de Elecciones y Consultas fuera el único autorizado para organizar las elecciones, absorbiendo totalmente las funciones que hoy tienen los Organismos Públicos Locales (OPLES). Este primer plan, no logró prosperar ya que la bancada de Morena no logró reunir los consensos necesarios en la Cámara de Diputados y se desechó en diciembre de 2022.
‘Medio implementan’ el Plan B
Al no funcionar, López Obrador anunció el llamado Plan B, un paquete de reformas a las leyes en materia electoral. Al hacerlo, el presidente argumentó un ahorro de tres mil 500 millones de pesos, teniendo como objetivo reducir el aparato administrativo del Instituto Nacional Electoral. El ejecutivo planteaba la salida de alrededor del 85 por ciento del personal del INE y la disminución de 300 oficinas distritales a 264. La Cámara de Diputados y Senadores, al no necesitar mayoría calificada lo aprobaron, y durante la primera quincena del año 2022 se hicieron correcciones a lo que se había aprobado, teniendo la versión final en febrero de 2023.
Pero, estos fueron objeto de 161 controversias constitucionales y siete acciones de inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), quien declaró la inconstitucionalidad por violaciones en el proceso legislativo.
Buscan el Plan C
Finalmente, ante la resistencia del INE, pese a los embates desde Palacio Nacional, AMLO busca que se apruebe lo que el oficialismo ha llamado el Plan C. Morena busca tener la mayoría calificada en las cámaras para que ahora sí pueda prosperar una iniciativa de Reforma Electoral. El Plan C, busca reducir de 500 a 300 el número de diputados federales y de 128 a 64 los integrantes del Senado de la República, según López Obrador el objetivo es evitar “excesivas estructuras burocráticas electorales”.
El Plan C también quiere eliminar a los OPLES, además busca que se tengan menos direcciones ejecutivas, tendría siete consejeros, y se plantea que éstos sean electos mediante voto popular.
Movilizaciones
Lo anterior provocó que organizaciones civiles, ciudadanos y partidos políticos tomaran las calles con marchas como ‘El INE no se toca’ o ‘Marcha por la defensa de la Democracia’, por parte de la Marea Rosa, ocurriendo la primera de estas movilizaciones el 13 de noviembre de 2022 y paso por segunda ocasión el 26 de febrero de 2023.
Mientras que el pasado 18 de febrero de 2024, se realizó otra concentración en el Zócalo capitalino, también para defender al organismo.
Fuente: Tribuna