Ciudad Obregón, Sonora.- A fin de visibilizar la necesidad de contribuir y mejorar la calidad de vida de las personas que viven con espectro autista, el 18 de diciembre de 2017, la asamblea general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) estableció el día 2 de abril como la fecha para conmemorar el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo y en Ciudad Obregón no es la excepción.
Pese a que los diferentes niveles de gobierno, instituciones de la sociedad civil y otras organizaciones realizan trabajos encaminados a brindarles la atención adecuada a personas, uno de los principales retos que enfrentan los padres de familia está relacionado con el acceso a la educación.
Te podría interesar
Norma Korina Santiesteban Valdez, madre de un menor con espectro autista, agregó que una condición que también juega en su contra es el aspecto económico, debido a que los costos son elevados y existen familias que no pueden cubrir el precio de las terapias.
La dificultad más frecuente con la que más nos encontramos nosotros aquí en Cajeme es en el área escolar, con el simple hecho de que sepan que nuestro hijo tiene autismo. Aunque tengan la palabra inclusivo, lo rechazan y no son inclusivos y si lo agarran es para no tener problemas”, comentó.
También comentó que el personal de algunas escuelas no está preparado para atender este tipo de situaciones y no existe información suficiente y agregó que la sociedad en general es excluyente con esas personas y los juzgan al igual que a los padres.
Debido a que el autismo es una discapacidad invisible, es difícil que las personas entiendan la condición de los autistas, porque no tienen un rasgo físico que los identifique como una persona con limitaciones y la gente no empatiza con ellos", agregó.
La madre de familia comentó que en la mayoría de las escuelas encaminadas a atender a personas con discapacidad, gran parte de la población la conforman niños y niñas que presentan esta condición.
Sin embargo, también destacó que en lo que respecta al desarrollo académico de los autistas, las autoridades no consideran incluirlos en otros niveles educativos más allá de la educación básica, manifestando que es como si en la adolescencia se acabara el autismo.
Finalmente, Norma Korina alza la voz para pedirle a la sociedad en general que sea más empática con aquellas personas que viven con el espectro autista e incluso con sus familiares, ya que desconocen la gran labor, esfuerzo y empeño que dedican para que sus hijos lleven una vida más apegada a la normalidad de la que su propia condición se lo permite.
Fuente: Tribuna