Ciudad de México.- Seguramente, alguna vez en tu vida escuchaste que algún conocido, amigo o familiar tuvo una embolia, esto sucede porque el flujo sanguíneo se detuvo o algún órgano interrumpió funciones a causa de un coágulo en alguna parte del cuerpo.
Una embolia se puede convertir en una situación peligrosa para el paciente en los siguientes casos:
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- Que la persona presente fibrilación auricular, es decir, que manifieste un ritmo anormal en los latidos del corazón.
- En caso de que cuente con algún daño en las paredes arteriales.
- Que tenga una condición que aumente la coagulación en la sangre.
De acuerdo con datos de Medline Plus, es posible que el paciente no manifieste síntomas de forma progresiva, algunas veces puede hacerlo rápidamente, mientras que otras puede que lo haga muy lento, todo depende del tipo de organismo de la persona y del tamaño del coágulo. Las señales más comunes de que alguien está teniendo una embolia son:
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- Extremidades frías
- Bajo o nulo pulso
- Dificultad para mover las extremidades
- Dolor y espasmo muscular en la zona donde se encuentra el coágulo
- Entumecimiento y hormigueo en las extremidades
- Palidez en las extremidades
- Ampollas
- Descamación
- Úlcera en la piel
- Necrosis
En caso de que una persona cercana a ti haya comenzado a manifestar este tipo de síntomas, será mejor llevarla inmediatamente al médico, ahí le darán anticoagulantes, analgésicos y medicamentos antiplaquetarios.
Fuentes: Medline Plus, Pinterest